Nicolás de Grecia ha sido durante mucho tiempo objeto de fascinación y especulación en la prensa y la alta sociedad. Conocido cariñosamente como el "Príncipe Playboy", es hijo de los reyes Constantino y Ana María, dejando una huella distintiva en el mundo de la realeza y más allá. Ahora, a sus 54 años y en vísperas de su divorcio de Tatiana Blatnik, su esposa de hace 14 años, muchos se preguntan cuál es su futuro.
Por qué le dicen el "Príncipe Playboy" a Nicolás de Grecia
Desde sus años más jóvenes, Nicolás fue un rostro destacado en la escena social europea. Su carisma, elegancia y gusto por las celebridades lo convirtieron en un favorito de los medios de comunicación y la alta sociedad. Con una lista de supuestos romances que incluye nombres como Gwyneth Paltrow, se ganó la reputación de ser uno de los "solteros más codiciados" de su tiempo.
Sin embargo, más allá de los titulares y las fiestas exclusivas, Nicolás ha llevado una vida multifacética. Después de estudiar relaciones internacionales en la Universidad de Brown y servir en el ejército británico, incursionó en los medios de comunicación y la consultoría empresarial antes de dedicarse por completo a su pasión por la fotografía.
Su matrimonio con Tatiana Blatnik, una organizadora de eventos venezolana, marcó una nueva etapa en su vida. Juntos, se mudaron a Grecia y empezaron a llevar una vida apacible y dedicada a proyectos solidarios. Pero, la reciente noticia de su separación plantea interrogantes sobre el futuro de Nicolás y su regreso a la vida pública que alguna vez lo definió.
A pesar de su reputación como el "Príncipe Playboy", Nicolás de Grecia ha demostrado ser mucho más que eso. Su dedicación a la fotografía y su compromiso con organizaciones benéficas en Grecia son prueba de una profundidad y una pasión que van más allá de los titulares de los tabloides.
AM