Sofía Hellqvist tiene mucho que celebrar. A sus 40 años, la princesa de Suecia ha logrado ganarse el cariño del pueblo y el respeto de la familia real, luego de una transformación personal que no estuvo exenta de polémicas. Su historia demuestra que el camino hacia la realeza puede ser inesperado pero inspirador a la vez.
Nacida el 6 de diciembre de 1984 en Täby, una localidad cercana a Estocolmo, creció como la mediana de tres hermanas. En su adolescencia, la familia se mudó a Älvdalen, una pequeña comunidad del norte de Suecia donde se habla el antiguo dialecto elfdalian. Allí cursó sus estudios y desarrolló una fuerte sensibilidad artística, interesándose por la música, el piano y la danza.

La transición de Sofía Hellqvist hacia princesa de Suecia
Al cumplir la mayoría de edad se trasladó a Estocolmo, donde trabajó como camarera, dependienta y modelo. Su imagen cobró notoriedad en 2004, cuando posó para la revista masculina Slitz y fue elegida Miss Slitz. Ese mismo año participó en el reality Paradise Hotel, lo que amplificó su exposición mediática. Aunque fue blanco de críticas por su pasado televisivo y fotográfico, ella eligió no esconderlo.
En 2005 se mudó a Nueva York, estudió contabilidad y desarrollo empresarial, y fundó una marca de ropa de yoga. También trabajó como profesora de yoga y camarera para solventar sus estudios. En 2010, su vida dio un giro inesperado al conocerse públicamente su relación con el príncipe Carlos Felipe. Al principio, la noticia generó controversia en Suecia, pero la pareja supo sobrellevar las críticas.

En paralelo, Sofía cofundó Project Playground, una ONG que ayuda a niños vulnerables en Sudáfrica. Su perfil solidario le permitió redefinir su imagen pública antes de ingresar oficialmente a la familia real.
La boda con el príncipe se celebró el 13 de junio de 2015 en Estocolmo. Con un vestido de la diseñadora Ida Sjöstedt y una tiara regalo de los reyes, Sofía se convirtió en princesa. Hoy es madre de cuatro hijos: Alexander, Gabriel, Julian e Inés, nacida en febrero de 2025.
Sofía Hellqvist también impulsa, junto a su esposo, una fundación contra el ciberacoso. De modelo a royal, su recorrido evidencia una transformación real y simbólica que ha conquistado a Suecia.
F.A

La victoria del Tío Trump

Ballet sneakers: así es la tendencia en zapatillas que obsesiona desde Bad Bunny hasta las que más saben de moda

“Me quedé viuda con un bebé de seis meses”: el doloroso relato de Mónica Gonzaga
