Charlene de Mónaco es una de las figuras más reconocidas en la actualidad de la realeza a pesar de que no sea considerada una monarca porque pertenece a un principado. La esposa de Alberto Grimaldi decidió instalarse en Suiza y alimentó los rumores de una separación.
Los Grimaldi atraviesan una etapa de crisis y viven separados
La historia de Alberto Grimaldi, el Jefe de Estado y príncipe de Mónaco, siempre estuvo rodeada de escándalos amorosos y polémicas que cuestionaban su imagen como líder de la nación. Si bien mantiene una relación muy directa con sus hijos, el hecho de que haya tenido dos de ellos extramatrimoniales y con mujeres diferentes siempre fue un problema para su relación con Charlene.
La princesa de Mónaco es madre de dos mellizos fruto de su relación con Alberto y la jefatura de Estado se disputará entre ellos dos en un futuro no tan cercano. Pero distintas fuentes francesas siempre aseguraron que la madre de los herederos nunca estuvo a gusto con que su marido compartiera tiempo con sus otros hijos.
La vida de las mujeres consortes que llegaron al principado estuvieron opacadas por la angustia de pertenecer a un sistemas tan estructurado. Y esto parece haberle sucedido a Charlene, quien cerró todas sus redes sociales y se instaló en Suiza para iniciar una nueva vida.
La noticia aun no fue oficializada por el principado, pero los rumores ya son difíciles de controlar. Sobre todo porque los pequeños están en el medio de un conflicto, donde deben quedar a cargo de su madre, pero también deben vivir en Mónaco. Según Nuria, la influencer española especializada en realeza, los Grimaldi acordaron que los niños compartan la misma cantidad de horas de calidad con ambos.
Parece que el principado de Mónaco ahora sí estaría llegando a su fin con la familia tradicional. Se sospecha que Charlene de Mónaco no era feliz en el matrimonio y una actitud de Alberto Grimaldi fue lo último que faltaba para decidir alejarse del sistema de realeza.