Furia Scaglione logró mantener su supremacía dentro de la casa después de la salida de Catalina Gorostidi.
En una jornada crucial dentro de Gran Hermano, la participante pasó por el confesionario para dar su impresión de este "duelo" con su ex amiga. Pero dentro de sus declaraciones, Furia Scaglione se refirió su pasado. "Con mi familia cenábamos te con pan. Coy seguramente te acordará", dijo en su confesión.
De esta manera, salió a la luz la triste historia de Furia Scaglione que, a pesar de su fuerte personalidad, ella recordó en otros momentos de la casa.
Cuál fue la dura historia de Furia Scaglione
La vida de Furia Scaglione estuvo marcada por desafíos y momentos difíciles que han forjado su carácter y determinación.
Furia reveló que quedó huérfana hace unos años, enfrentando la pérdida de sus padres en circunstancias dolorosas. Su padre falleció hace aproximadamente un año y medio debido a problemas de salud mental y física, mientras que su madre perdió la vida en 2019 a causa de un cáncer de mama.
La partida de sus padres la sumió en una situación difícil, asumiendo la responsabilidad de manejar los asuntos familiares en un momento de profundo dolor. Relató con emotividad cómo tuvo que lidiar con trámites y responsabilidades que normalmente no corresponden a una persona de su edad. "A las 12 de la noche estaba con el documento de mi viejo, firmando un papel, un reloj y todo un lugar re oscuro... demasiado tétrico", comenzó contando.
"Mi hermana en el mismo momento, dice: 'vendamos todo', re codiciosos... Nunca me preguntaron: 'che te sentís bien', '¿qué vas a hacer?', '¿vas a vivir sola ahí adentro?' No, todo el tiempo pensando en ellos...", cuestionó.
Furia compartió cómo, a pesar de las adversidades, siguió adelante, enfocándose en sus objetivos y manteniendo su fuerza interior intacta. "Yo pasé un período que no tenía para comer porque tenía que pagar cosas de mi papá... Yo nunca me puse mal ni me enojé... Seguí entrenando.. Nunca le conté a la gente que estaba a mi alrededor que me pasaba todo esto. Yo comía arroz y huevo, comía mucho arroz. Hasta que un día me puse re mal y le dije a mis compañeros: 'no tengo comida para competir, quiero competir y no puedo", relató la entrenadora.
Durante su estadía en la casa de "Gran Hermano", Furia reflexionó sobre la gratitud por las comodidades y oportunidades que tenía a su disposición, reconociendo la importancia de valorar lo que se tiene.