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Editor de Protagonistas, música y Lifestyle.
Juan Cruz Cabral Lodoli
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Máxima de Holanda continúa su viaje oficial por Asia del Sur, como secretaria general especial para la ONU en la consejería de financiación inclusiva para el desarrollo. Su majestad trabaja para dar visibilidad y promover el acceso a servicios financieros a gente en riesgo de exclusión y también el empoderamiento de la mujer.
Con esta visita que la consagró como la reina más humana y cercana, Máxima logró cautivar a todos con sus originales looks. En primer lugar eligió un conjunto de estilo hippy, es decir un vestido vaporoso de flores. Largo hasta los tobillos, el diseño llevaba manga francesa, ligeramente abullonada y un escote bastante pronunciado, que iba a acompañado por borlas blancas. Las flores en tonos rojos y naranjas marcaban el compás de los accesorios.
En cuanto a los accesorios,la monarca escogió unos zapatos de la firma Valentino y de taco fino en rojo y nude; por otro un gran bolso naranja de punto o de ganchillo con cadena dorada, de original diseño y que se reafirmaba en la estética hippy-chic del conjunto.
Más tarde, la reina participó en varias mesas redondas y se reunió con algunos misnistros y el gobernador del banco de Bangladesh, fue entonces cuando se animó a lucir un conjunto en las tonalidades de los azules, que acompañó con pendientes compuestos por tres grandes piedras en tonos ámbar, dándole al conjunto un punto más formal.
Máxima de Holanda llevó el pelo suelto, al natural, y un maquillaje muy discreto, prácticamente imperceptible.
