Plenamente enamorada de Juan Martín del Potro, Jimena Barón decidió armar las valijas y seguir a su novio hasta Shangai, ciudad donde el tenista compitió por el Masters 1000. La actriz no lo dudó y viajó para alentar a su amor, pero esta vez tuvo que dividir su corazón en dos y despedirse -por unos días- de su hijo, Momo.
Una vez de regreso en Buenos Aires, Jime aprovechó para ponerse al día con el chiquito y llenarlo de mimos. Las redes sociales fueron eco del reecuentro y el gran amor que su mamá le dio después de estar separados a varios kilómetros de distancia.
"Te amo tanto que no me entra en el cuerpo el amor ️", escribió la flamante mamá junto a una placa donde se la puede ver feliz y muy cómplice junto al sonriente Morrison.
Por supuesto que no tardaron en llegar los miles de corazoncitos y cientos de comentarios que celebraron el encuentro de la actriz y su niño.
De hecho, tampoco faltaron los halagos: es que la felicidad que transmitió la placa fue inmensa. Definitivamente, no hay mejor lugar que casa, más si es en los brazos de mamá.