Por primera vez, Sebastián Estevanez habló del accidente que casi le cuesta la vida: "Pensé que me moría"
En diálogo con Héctor Maugeri para +CARAS, el actor recordó el accidente doméstico que casi le cuesta la vida durante la pandemia y el largo proceso de recuperación que atravesó.
En una charla íntima con Héctor Maugeri para +CARAS, Sebastián Estevanez revivió el episodio más traumático de su vida: la explosión de un bidón de alcohol que le quemó la cara y la mano. El actor jamás imaginó que una tarde común de invierno podía transformarse en una pesadilla. “Me explotó un bidón y pensé que me moría”, dijo con crudeza. Y recordó que todo comenzó intentando encender un hogar que parecía apagado.
“Pensé que la llama estaba muerta y que el bidón no tenía más,” relató el actor conocido por protagonizar a Marcos en Dulce Amor. Pero la mezcla de fuego invisible y alcohol generó una explosión inmediata que le arrancó la piel del rostro. En segundos, el dolor fue insoportable, una sensación que él mismo describió como un ardor punzante que lo paralizaba. “Ahí empecé a gritar del dolor y justo estaba Ivana -su mujer- arriba con Francesca”, agregó.
Sebastián Estevanez y la batalla contra el dolor
El actor recuerda que se puso una crema fría que tenía en la heladera y que fue lo único que logró frenar mínimamente la quemazón. “Después se me ampolló toda la cara, perdí la piel, todo”, contó. La ambulancia tardó media hora en llegar y durante ese tiempo caminaba sin parar para tolerar el dolor, incapaz de quedarse quieto. Cuando lo asistieron, pidió calmantes y un ansiolítico para poder respirar.
Sebastián Estevanez en +CARAS
Las quemaduras fueron de primer y segundo grado, un cuadro que requirió meses de tratamiento. Su amigo, el doctor Gustavo San Pietro, lo atendió diariamente en su casa, cambiándole la piel lesionada una y otra vez. “Es un dolor… porque cuando se te está curando, te tienen que cambiar la piel, y de nuevo rojo vivo”, recordó. Era un proceso en el que cada avance parecía retroceder.
Sebastián Estevanez y el miedo más profundo
Durante las primeras horas, su miedo principal fue que iba a pasar con su vida. “Me empecé a marear, pensé que me iba a morir”, confesó con la voz baja. Aun así, decidió no internarse y realizar todo el tratamiento en su hogar, convencido de que podía recuperarse con el apoyo de su familia y su médico. “Lo primero que quería era vivir y no haberme muerto por lo que pasó”, afirmó con honestidad. La fe, dice, fue su motor.
Sus hijos fueron quienes más sufrieron el impacto visual. “Mis hijos no me querían ver. Era una momia” contó el actor a +CARAS. Los parches, las vendas y el color rojizo de la piel recién regenerada les producían impresión y no podían sentarse a comer con él. Aun así, Sebastián fue paciente y entendió sus reacciones, sabiendo que también ellos atravesaban su propio miedo. Con el tiempo, las cicatrices comenzaron a clarear y su rostro recuperó forma, gracias a su constancia y su actitud positiva.
Sebastián Estevanez y Héctor Maugeri
“Siempre tengo en la cabeza que hay cosas peores y soy bastante positivo”, afirmó. También agradece que el accidente haya sido con él y no con sus hijos. “Si me quedaba mal, era algo estético”, reflexionó. Hoy, mira hacia atrás con alivio, orgullo y una madurez profunda. Sebastián Estevanez sobrevivió a un episodio que pudo haber sido fatal y volvió a la vida con un mensaje de fortaleza. Su historia demuestra que incluso en el dolor más extremo puede brotar una fuerza inesperada, capaz de transformar lo oscuro en una nueva gratitud por estar vivo.
También te puede interesar
-
Sergio Goycochea reveló cómo hizo para superar las tentaciones de ser un futbolista famoso: "Me sobrepasaba todo"
-
Sergio Goycochea se sinceró sobre su nueva vida como abuelo: "Todo se queda corto"
-
Andrea Ghidone reveló que se casa con "El señor del tabaco": “Ya no miro aquello que me gustaría que fuera pero no es”
-
Andrea Ghidone contó que tiene una carrera lejos de los medios que pocos conocen: “No me daba alegría”