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Laura Ojeda nació en Catamarca, realizó su formación periodística en la provincia de Córdoba, luego de recibirse volvió a su ciudad de origen y ejerció su labor mediante un programa de televisión local de contenido político/comunitario. Luego fue productora de un programa de radio. Hay quienes dicen que es detallista y que mantiene una gran capacidad creativa e innovadora.
Roberto Suarez es oriundo de Santiago del Estero, más conocido como “Tito” entre sus pares. Curso en Córdoba la carrera de ingeniería civil, pero durante el cuarto año vigente descubrió que su pasión iba más por el camino de la arquitectura y el diseño. Ambos se conocieron estudiando, y hoy abrazan este proyecto juntos; como pareja, como familia, siendo padres llenos de orgullo de cuatro hijos: Nicolás(13) Valentina(12) Martina(10) y Macarena(8).
A Tito le apasiona la fabricación de objetos y muebles, su amor por la creación no le permitía ver cosas sin que una idea se le cruce por la cabeza para descubrir que poder hacer. Quizás se trataba de una palpitación hereditaria, ya que sus abuelos fueron los dueños de la casa de antigüedades más grande del norte.
Comenzó fabricando una lámpara, la cual aprobó su talento para luego crear distintos diseños como mesas de madera, arañas, apliques, veladores, y lámparas de pie. Eso les permitió tanto a Laura como a Tito la confianza suficiente para presentarse en una Feria. También debido a la insistencia y al apoyo de muchos amigos y por sobre todo sus familias para que se animen a mostrar sus creaciones.
De esta forma, luego de varios meses fueron ampliando la variedad de muebles y así tomaron la decisión de abrir un local. En 2005 nace La Forja. Un trabajo logrado por la pasión y el esfuerzo. Pasan horas en busca de nuevas tendencias de decoración y viendo cómo aplicarlas en sus diseños. Aunque para ellos, el buen gusto es simplemente un instinto. Lo que los caracteriza puntualmente es el diseño de muebles a medida.
Crean desde una mesa chiquitita hasta una mesa absolutamente grande. Construyen siempre de forma especial y personalizada, sin repetición. Cada pieza es única. El nombre identifica de una forma sin igual el estilo que mantienen, forja significa llevar la forma de algo al máximo. Usan poco brillo, maderas macizas de guatambu, guayubira,laurel y lapacho entre otras, utilizan géneros cálidos: tonos tierra y los grises en su plenitud.
Una tendencia al estilo rústico francés, o mejor dicho al estilo industrial europeo. En La Forja no solo podes encontrar mesas de comedor, muebles varios, arañas de hierro y madera. Sino también todos los complementos para amoblar: sillones, telas, colores, alfombras, objetos con muchos detalles. Actualmente utilizan una paleta de colores naturales; desde los tonos tierra como el visón o el beige, hasta tonos cálidos como el nude el rosa viejo o el azul gastado.
Y a la vez toques de dorado y plata. Además blancos gastados combinados con marrones pálidos, reforzando la beta de la madera con lustre de laca. Basándose siempre en maderas sólidas, de calidad. Que duren para toda la vida. Tito está en el taller, creando restaurando o reciclando muebles, buscando renovar antigüedades dándoles un estilo más moderno.
Y Laura se encarga de asesorar al cliente, buscando la satisfacción única en cada detalle que brinda. Ambientando nuevos espacios para que cada persona lo sienta único y propio.
“El sueño a futuro es seguir creciendo, comenzamos trabajando en una casa antigua, con muy pocas cosas y dejábamos la puerta abierta porque la gente no entendía bien si era un local o una casa. Nuestro taller está estable, el negocio consolidado y es importante saber que cuando uno se encuentra bien y recibe día a día la respuesta positiva por parte de los clientes, surgen millones de ideas” indican los creadores de La Forja.
Para contacto: Tel: 3834 92 5567.
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