Confiesa aprender cada día de la maravillosa aventura de ser madre. Y es que a casi siete meses de la llegada de su hijo Francisco, Fabiola Yáñez (41) parece transitar una etapa de pleno disfrute y energía, que no sólo abarca su maternidad sino que también se extiende a cada una de sus acciones solidarias y compromisos sociales.
Radiante y feliz con su presente, la primera dama de Argentina compartió con CARAS la exhibición de cultura y diseño que organizó junto al Centro Cultural Coreano para celebrar el 60 aniversario de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones, con el objetivo de generar una política cultural que refuerce las industrias de diseño de indumentaria de cada país. Así fue como se celebró el desfile binacional en el Centro Cultural Coreano (CCC) – ex Palacio Bencich– en el que más de 30 modelos exhibieron los diseños de Corea y Argentina, y del que Yáñez participó de una forma muy especial.
“Para la cultura coreana el número 60 es muy importante. Significa el final de un ciclo y el comienzo de otro que se augura sea más próspero. Por este motivo el embajador Jang Myung- soo y la agregada cultural vinieron a visitarme para decirme que a ellos les interesaría mucho que yo vistiera un Hanbok. la prenda tradicional coreana”, detalló Yáñez a CARAS.
“Se me ocurrió proponerles que generemos una acción qué ponga en contexto y muestre la cultura coreana y el diseño y talento argentino, que podíamos festejar esta unión bilateral haciendo un Hanbok con un diseñador o diseñadora coreana y uno argentino, convocar a otros de Corea y a los más destacados de nuestro país, y que la acción la podíamos reproducir en Seúl. Les encantó la idea y así comenzó a organizarse este maravilloso despliegue de talento, cultura y trabajo”, agregó la primera dama.
Seis fueron los diseñadores que representaron a nuestro país: Benito Fernández, Cynthia Martos, Adrián Brown, Gabriel Lage, Laurencio Adot y Pablo Ramírez. Y tres las que mostraron sus creaciones en nombre de Corea: Hyesoon Kim, Minkyung Cheong y Jinwha Choi, quienes presentaron sus versiones de Hanbok, la vestimenta tradicional coreana con colores, géneros llamativos y líneas muy simples; presente ceremonias, bodas o distintas reuniones sociales.
Fabiola Yáñez lució espléndida con el vestido especialmente confeccionado para el evento y realizado en forma conjunta por la diseñadora coreana Heajin Kwon y su par argentina Ivana Picallo, como gesto simbólico de la unidad entre ambas naciones; un diseño inspirado en el Hanbok, pero con una visión contemporánea argentina.
Feliz con los resultados de su iniciativa, y ya en diálogo exclusivo con CARAS, Fabiola Yáñez también se refirió con gran dicha sus días como mamá. Siempre cerca de la niñez, Yáñez viene además de firmar un acuerdo con la Fundación Garrahan para la construcción de las Casas AMOR: 24 casas que replican el modelo Casa Garrahan en todas las provincias de nuestro país, para dar contención y guía a los padres y niños que viven lejos de los centros especializados de salud. “Es un trabajo que me llena de ilusión. También junto a la Fundación Banco Nación vamos a apadrinar 8 de las habitaciones de la casa central por el lapso de un año con reformas y mantenimiento de las familias que allí se hospeden”, dijo.
-¿En qué aspectos se siente cambiada con la llegada de su hijo, en qué mujer se convirtió?
-Francisco es un ser de luz que llegó a mi vida en un momento muy especial, el momento justo. Él es el motor que me impulsa a seguir trabajando día a día. No me convertí en otra mujer, sigo siendo la misma pero sí con más fuerza de la que tenía.
-¿Qué tipo de madre apareció en usted y cuáles son sus prioridades?
-Soy una madre como cualquier otra, enamorada de mi hijo y agradecida a la vida porque Francisco es un bebé sano, fuerte y su sonrisa todo lo puede.
-¿Cuál es la forma que elige para criar a su bebé, qué pautas le resultan esenciales?
-La forma que elijo para criar a mi hijo es la de la libertad, necesito que haya un ambiente armonioso positivo y cuidado cerca de él. Creo que los bebés y los niños perciben totalmente nuestras emociones, no quiero transmitirle sentimientos que lo perturben y lucho por eso a cada momento, porque es lo más importante. Las pautas son la organización y los horarios. Francisco se despierta muy temprano, por la noche ha llegado a dormir cinco horas seguidas, comer y volver a dormir. Es un genio, se levanta muy temprano, come, juega, hace algunos pequeños ejercicios que corresponden al acompañamiento de su crecimiento y después duerme una o dos horas. Al mediodía salimos a pasear al aire libre, vuelve a jugar y antes del horario de su baño de las siete de la tarde, duerme una pequeña siesta, se baña come y se duerme. Además de qué hacemos todo muy organizado, él mismo se da cuenta de los horarios y se muestra molesto como pidiendo o transmitiendo que en ese momento le falta algo.
-¿Qué sensaciones y emociones la invadieron durante el embarazo, cómo vivió y transitó esa experiencia al igual que el nacimiento de su niño?
-Durante el embarazo pasé por muchas etapas de alegría, pero también de angustia, depresión, felicidad absoluta, cada vez que iba a un control. Y en la última etapa me invadió un poco el miedo y ya casi al final del embarazo confié en que todo estaría bien y ansiaba que naciera ya. El parto fue un momento sensacional. Tan solo sentí tres veces en el lapso de una hora la
panza más dura de lo normal, les avise a los médicos y decidieron que vaya directamente al quirófano. Fue un parto humanizado, en cuanto lo sacaron de mi vientre lo pusieron en mi pecho y de esa misma forma nos trasladaron juntos a la habitación. Francisco inmediatamente que nació fue indescriptible y maravilloso.
-¿Qué puede decirnos sobre la personalidad que va despertando en Francisco? ¿Cómo es él?
-Es muy tranquila y alegre, él es muy observador; pero también, como les decía antes, cuando algo está fuera de su horario y rutina es demandante y lo hace saber.
-¿Qué momentos son “sagrados” y cuáles son los que más la conmueven y por qué?
-El momento más sagrado es cuando lo saludo al despertar en la mañana y cuando se queda dormido junto a mí en la cama por las tardes. Estos son los momentos que más me conmueven, porque siento que somos uno, que estamos conectados y su sonrisa no se compara con nada en este mundo.
-¿Cómo organiza su agenda de primera dama con la de madre?
-Mi agenda la organizo cada noche y trato de juntar varias actividades en una misma tarde, así al otro día puedo dedicarme más a él y gestionar con el teléfono todo lo que más pueda.
-¿Cómo es Alberto en su rol de papá y cómo vive él esta nueva paternidad? ¿De qué forma participa en el cuidado del bebé?
-Alberto es un papá feliz y agradecido por su hijo. Todas las mañanas lo saluda antes de comenzar su agenda del día, durante la tarde le enviamos fotos y videos y si es posible alguna vez hacemos videollamadas. A su regreso en la noche lo pasea cuando Francisco se está por dormir. Francisco trajo alegría a nuestras vidas.
-¿Siente que la llegada de Francisco la renovó y le aportó más energía para encarar su trabajo? ¿Cuáles son hoy sus metas?
-Si, es Francisco quien me impulsa a seguir, me inspira a crear y a que cada una de mis acciones tenga un beneficio para los otros. Quiero que mi hijo crezca consciente de todas las distintas realidades de este mundo, que tenga su propio poder interior y que sea consciente. El lugar en el que nació fue tan sólo una circunstancia, él me da la certeza para lograr cualquier objetivo que me propongo.