Esta historia de amor comenzó hace más de dos años, cuando Vicky Xipolitakis se encontraba en el esplendor de su vida artística. Javier Naselli, con caballos de polo, paseos por la Quinta Avenida y Ferraris de distintos colores llamó la atención de la vedette. Ella en muy poco tiempo transformó su vida, que se dividía entre Buenos Aires y NYC. Luego llegaría el momento de sellar su amor con un casamiento secreto y la llegada de Salvador Uriel como moño de una relación que parecía fantástica.
“La convivencia se fue dando sola. Yo me adueñé de una habitación de su casa que no se usaba”, confesaba la Griega. La relación creció a pasos agigantados en muy poco tiempo. Vicky se radicó con él en Nueva York y oficializó el noviazgo en el living de Susana Giménez, en julio. “Yo siempre soñaba con un príncipe y le pedí a las estrellas que me mandaran uno. Y así fue”, contó Xipolitakis en una entrevista exclusiva con Caras.
Tras la fuerte exposición mediática, Javier fue puesto bajo la lupa de muchos medios -como la Revista Noticias- y se encontraron diferentes momentos oscuros de este "Príncipe Azul".Naselli estuvo implicado en una investigación por una supuesta maniobra ilícita con bonos en el 2013, que habría sido encabezada por el ex ministro de economía del kirchnerismo, Axel Kicilloff.
Durante mucho tiempo él fue un desconocido para muchos, pero famosos para el entorno de le economía mundial. Pero este especialista de las finanzas es ejecutivo del UBS Investment Bank y, según señalan quienes conocen este mundillo, es uno de los principales operadores de esa firma en el país. Desde esa posición, Naselli, no sólo se habría ganado la relación con importantes personalidades -como el candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires, Kicillof- sino que también pudo realizar grandes negocios, algunos de ellos, denunciados ante la Justicia.
La vedette siempre se encargó de contar alegremente y con la ingenuidad que la caracteriza es que su marido le recomendó que, en público, si le preguntaran por él, sólo dijera que es “un hombre de finanzas”. “Pero como yo no puedo seguir libretos o decir frases estudiadas, la primera que me mandé fue decir ‘Javier es muy tranquilo como buen hombre de finanzas que es’”, aseguró.
Vicky junto a Naselli logró disfrutar de yates, de comprar las marcas más importantes del mundo y otros tantos lujos, la Griega bromeaba: “De mi novio sólo quiero que me llene de amor, que es lo primordial en mi vida. ¡También que me cumpla algunos caprichitos, eso está muy bien!”.
Una de las cosas que siempre disfrutó el banquero a la cual se sumó la modelo, es el Polo. El aristocrático deporte es una de las pasiones de Naselli, quien incluso tiene un haras en su mansión de fin de semana en Los Hamptons, una de las zonas rurales más exclusivas de Nueva York. “Javier juega muy bien y me puso un profesor para que yo aprenda”, contó Xipolitakis en alguna oportunidad.
Hace escasos meses, su vida cambió rotundamente con la llegada de Salvador Uriel, el pequeño que la rubia deseó por mucho tiempo con este Principe Azúl, quien primero tuvo un roce con ella en noviembre del año pasado. Pero esta semana la historia tomó un lado oscuro y Vicky lo denunció por violencia de género, y despertó la furia del entorno griego.