La separación entre Ximena Capristo y Gustavo Conti se confirmó en medio del escándalo después de que la ex Gran Hermano compartiera algunos chats de su marido con otra mujer.
A pesar de que después borró el material, el vínculo entre la legendaria pareja se rompió y, por el momento, están separados. “Estoy tranquila, pasé un momento triste, estuve muy triste, por eso no quería hablar. Siento que me confundí en publicar eso en las historias porque en ese momento sí estaba muy enojada, y ahí exploté”, contó la actriz en LAM días atrás.
Luego, agregó: “Nosotros ya veníamos desde hace unos meses hablando del tema de abrir la pareja. A mí no me sorprende que pase esto, pero sí me molestó muchísimo y lo que me dolió muchísimo es que durante meses yo sé de esto y me lo guardé", dijo.
Lo cierto es que, después de estas declaraciones, "La negra" cambió el tono moderado y tiró una fuerte frase que replicó Rodrigo Lussich en Intrusos: “No tengo ganas de hablar por ahora. No tengo nada que decir”, dijo Ximena al periodista.
“Sí te puedo decir que soy la mujer más cornuda del condado. Y no me copa eso. Por eso, por el momento no voy a decir nada”, agregó.
"Félix no sabe que su papá no duerme en casa"
Ximena Capristo confesó también que aún no le contaron a Félix, su hijo de tres años, que su papá no duerme en casa. En exclusiva para CARAS, la diosa afirmó que Conti está instalado en otro departamento. “Estamos distanciados pero no separados. A la vez somos gente grande que tenemos un niño en común y queremos lo mejor para él. Si hubiera pasado esto en otro momento sin hijos no te puedo decir qué decisión hubiéramos tomado”, explicó la vedette que desde hace semanas ya no duerme bajo el mismo techo que el papá de su hijo Félix (3).
“Yo le pedí por favor que necesitaba un tiempo y él e fue a otro departamento que tenemos. Viene a la mañana desde tempra no hasta que el nene se duerme y des pués se va a otro lugar. Prefiero por el momento que no esté acá porque no pasó tanto tiempo y todavía no creo que sea un momento para que todo vuelva a la normalidad. ¡Hay que remarla, che! Sí ahora estoy un poco menos enojada que antes, pero todavía no se me pasó. No es de un día para el otro y hay un montón de cosas en el medio que se tienen que empezar a dar para que las cosas fluyan”, agregó.