No se considera una “It Girl” ni una “Influencer”, pero reconoce que su estilo despierta admiración. Lejos de proponerse ser famosa, Lucía Celasco (24) vive lo inevitable: trascender por ser la heredera de Susana Giménez o simplemente “Kika”, como ella la llama. Y aunque durante algún tiempo padeció la exposición, en los últimos años se amigó con ella y decidió compartir un “recorte” de su vida. ¿El resultado? Más de 200 mil seguidores en Instagram que siguen cada prenda que viste, cada lugar que visita y, en definitiva, la elevan como un referente aspiracional.
Lee también: Lucía Celasco y Joaquín Rozas, reconciliados y enamorados en Punta
“Se dio así, naturalmente”, explica la joven que acaba de protagonizar la nueva temporada de “Lovely Denim”, la firma de indumentaria que lleva adelante con su tía, Mariana Toledano. Inspirada en París, la colección “El Tour de France” toma los colores rojo y negro del famoso cabaret Moulin Rouge. Junto al jeans, prenda insignia de la marca que incorpora detalles de cintas french y terciopelo, hay abrigos militares al estilo Napoléon, en velvet y terciopelo, y cuellos que simulan “chokers”.
El empoderamiento de la mujer, las cuentas pendientes de la moda en este aspecto, si seguiría los pasos en televisión de la diva, si le pesa la fama heredada y cómo es crecer en el seno de una familia de mujeres con convicción de ser, en una charla íntima con CARAS.
—¿Cómo vive el hecho de ser considerada una “Influencer” o “It Girl”? ¿Lo siente como un peso o con el tiempo aprendió a disfrutarlo?
—Me halaga pero trato de no pensar en eso demasiado; me siento más libre de esta manera. Yo sigo a muchas personas en redes, me gusta mirar lo que hacen, lo que cuentan, aprendo de ellos y si soy eso para alguien, está buenísimo también. Las etiquetas y los títulos no van conmigo.
—¿Por qué cree que es una referente para muchas mujeres?
—Me cuesta pensarme como referente, puede ser que algunas mujeres tomen inspiración en algún look mío o le surjan ganas de ir a comer a un lugar que mostré en una foto, pero no sé si mucho más que eso. Me parece que las redes sociales son un gran lugar para explorar y descubrir cosas, marcas, lugares, ideas y me encanta estar ahí proponiendo también. Creo que lo hago desde un lugar de humildad, tengo un perfil muy bajo, me muestro tal cual soy, no hay demasiados filtros, ni vueltas alrededor de lo que subo, eso quizás atraiga o funcione como diferencial y si es así, me pone contenta, porque es un mensaje con el que estoy muy de acuerdo, animarse a mostrarte tal cual sos.
—Dijo que nació en la era del estilo personal y que no sigue tendencias, ¿Cómo funciona la moda hoy y cómo define su estilo en particular?
—Me encanta la moda, como fenómeno, como universo... Me gusta saber dónde se hicieron los desfiles, quiénes fueron los diseñadores, cuáles son las modelos del momento. Yo vivo una vida muy tranquila; camino por la calle, salgo con mis amigas, me gusta estar cómoda, casi siempre en jeans, por muchos años también calzas, amo las remeras de algodón básicas y los borcegos. Esa combinación terminó siendo un look un tanto rockero, un tanto urbano, y aunque a veces se percibe como redundante, yo descubrí la fórmula con la que me siento bien.
—¿Se considera parte de lo que se conoce como estilo “Effortless” (sin ningún esfuerzo, fluido, natural)?
—Me parece que sí. A la hora de vestirme no doy muchas vueltas, tengo claro lo que quiero.
—¿Qué no puede faltar en su vestidor?
—¡Jeans!
—Dijo que su guardarropas se compone de 35% remeras blancas, 15% jeans, 15% carteras y borcegos, 10% camperas de cuero y el resto entre sombreros y zapatillas, ¿Sigue siendo así la composición? ¿Qué más agregaría?—Creo que ahora estoy un poco más tranquila con los sombreros… Sigue habiendo muchas remeras y ahora sumé algunos vestidos y tops más arreglados.
Lee también: Lucía Celasco: “Nunca me molestó la popularidad de Kika”
—¿Cuáles son sus accesorios preferidos y por qué?
—En cuanto a lo que son anillos, reloj, collar, etc., siempre uso lo mismo desde hace años. A veces sumo o saco algo pero casi siempre llevo lo mismo, no soy de cambiar mucho los accesorios.
—¿Son los tatuajes un accesorio en la actualidad para la moda?
—No lo sé… Me parece que son un factor más a tener en cuenta a la hora de vestirte. A veces puede ser que quieras mostrar o no mostrar un tatuaje. Yo no pienso en los míos de esta manera, igual son más una cosa personal, que me gusta tener.
—¿Es cierto que le gustan las prendas vintage?
—¡Sí, me encantan!
—¿Heredó alguna prenda de su mamá o de Susana? —Sí, a veces me regalan y hay cosas que pido prestada o que compartimos. Tengo un top de Gaultier, bordado de lentejuelas, de Kika que usó en un programa hace mil en el que entrevistó a James Brown. También tengo un traje de baño de mamá tipo “Baywatch”, súper 90’s, de animal print ¡Que es lo más! Algunos sombreros o carteras también, y todos tienen doble encanto, son una linda prenda y aparte tienen valor sentimental. Las uso menos que el resto, pero son de esas cosas que te ponés y durante toda la noche la gente te pregunta de dónde es.
—¿Cómo es trabajar con su tía y ser imagen de su marca?
—¡Me encanta! Llevamos varios años colaborando ya. Nunca me sentí tan cómoda trabajando para una marca. Definitivamente es un desafío, porque aprendo mucho sobre diseño, ayudo a tomar decisiones y a buscar referencias; es un proceso muy estimulante. Cada temporada sumamos nuevos ítems, al principio eran sólo jeans y algunas remeras y hoy hay carteras, tapados, sweaters, vestidos. Está buenísimo ver crecer a la marca. Ser la imagen se dio como algo natural, tomo parte de eso también y me divierto haciéndolo.
—¿Cuáles son las tendencias de esta temporada?
—Para esta transición de temporada los tops y vestidos lenceros, los sweaters con algún detalle de personalidad, cuellos, apliques, espaldas divertidas… El color rojo, el charol, la gamuza…
—¿Qué tip daría a la hora del Make Up?
—Yo no soy de maquillarme mucho salvo cuando tengo que hacer fotos. En mi día a día sólo uso un poco de rouge a veces, nada más. Prefiero toda la vida el look de una cara fresca; cuidarme la piel para no necesitar mucho Make Up.
Lee también: Lucía Celasco cuenta sus secretos de estilo y belleza
—¿Cómo fue crecer en una familia de mujeres de personalidades tan fuertes?
—Inspirador. Me encanta que las mujeres de mi familia hayan sido y sean mujeres fuertes y desafiantes, cada una con sus temas. Todas se permitieron tener la vida que querían.
—Como referentes de muchas chicas de su edad, ¿Qué opinión tiene acerca del actual empoderamiento de la mujer?
—Me parece que se está dando un cambio, lo vemos todos los días. Se dan charlas que antes no se daban, nos damos cuenta como mujeres que sólo uniéndonos podemos transformar ciertas realidades que ya no se deben seguir ignorando. A nivel mundial se está dando y es interesante y motivador presenciar toda esta evolución a nivel cultural que creo que vamos a lograr.
—¿Cree que la lucha de la mujer por la igualdad de género impacta de alguna manera en la moda? Usted misma dijo que hay que salir de los estereotipos por ejemplo usando “jeans boyfriend”...
—La industria de la moda tiene su trabajo que hacer, empezar a sumar diferentes estilos de mujeres, mostrarnos de una manera más reales quizás. Hay muchos diseñadores que se sumaron al movimiento del #MeToo, hay varios cambios que se están dando y esto tiene mucho que ver con el reclamo por igualdad de género que se está dando.
—¿Qué es lo lindo de ser mujer?
—Lindo, no sé. Me es desafiante e inspirador; las mujeres somos capaces de mucho, si nos lo proponemos tenemos el poder de transformar nuestra realidad.
—Se define como introvertida, ¿Cómo nace la decisión de abrir su mundo?
—Yo estuve expuesta a cierta exposición desde muy chica y eso creo que en gran parte hizo que me vuelva una persona introvertida. Soy reservada, no me gustaba ni me gusta salir en una foto “robada” de una revista. Pero compartir a través de las redes sociales es otro tema. Como todos, uno hace un recorte, el que cada uno tenga ganas de hacer, en el que traza la línea entre lo que elige mantener privado y lo que quiere mostrarle a los demás. En esa dinámica aprendí a sentirme cómoda y esto me incentivó a dejarme ver mucho más que antes y compartir un poco de mi mundo, todos los días.
—Además de la moda, le gusta viajar ¿Por qué y cuáles son sus ciudades favoritas en el mundo?
—Me encanta viajar porque te cultiva. Aprendés de culturas, de tradiciones, comés diferente, vivís diferente, rompés con la rutina. Las ciudades que más disfruto visitar son New York, Miami y Los Angeles.
—¿Cómo fue crecer con la exposición involuntaria por ser “la nieta de…”? ¿Cómo se lleva hoy con ese título? ¿Cree que logró abrir su propio camino?
—Como decía antes, en un principio me pesó, hoy me considero más mujer, aprendí mucho, sé cómo lidiar con la gente, y trato todos los días de abrirme camino.
—¿Siente que se amigó con la exposición y logró encauzarla en algo productivo?
—¡Si!
—¿Qué necesita Lucía Celasco para ser feliz?
—Un café a la mañana, mi perra, mi familia, mis amigos y una buena comida con una copa de vino.
—¿Se arrepiente de no haber seguido una carrera, por ejemplo, como “Producción de Moda”, o justamente el salirse del molde es su secreto?
—Me parece que terminar algo sólo por terminarlo no tiene mucho sentido. Yo no soy muy exigente conmigo misma. En ese momento no quería seguir estudiando y me permití hacerlo. Me concentré en hacer otras cosas que creía que para esa etapa de mi vida eran más productivas.
—De algún modo se crió entre camarines y pasillos de TV, ¿Le gustaría hacer algo en televisión, quizás referido a la moda?
—La verdad es que me cuesta imaginarme en la tele, aunque uno nunca sabe.
—¿Le pesa de que “Kika”, como le dice usted, sea la mujer más famosa de la Argentina?
—A veces me condiciona pero no me pesa para nada, al contrario, es un orgullo para mí.
por Diego Esteves