El 19 de noviembre es una fecha muy importante para Mónaco porque se celebra el Día Nacional. Por su parte, la princesa Charléne solía deslumbrar en este acontecimiento con abrigos largos hasta el suelo, recordando la estética eclesiástica. Sin embargo, en 2024 la princesa rompió sus propias normas y se alejó del abrigo y las prendas largas hasta los pies.
Charléne de Mónaco rompió con su regla de vestimenta y lució un look novedoso
En este sentido, el 19 de noviembre se ubica como un día que requiere la presencia obligada de la familia Grimaldi, pero Charléne de Mónaco decidió destacar con un atuendo que no suele lucir mucho: un conjunto en color lila, confeccionado con tela ligeramente satinada.
El conjunto se formó por una chaqueta bien estructurada, con cuello redondo y cierre lateral, adornado por dos enormes y originales botones plateados. Por su parte, la sección inferior del conjunto estaba compuesta por un pantalón de corte recto que termina ligeramente por encima de los tobillos, diferenciándose de los anteriores conjuntos largos
A su vez, el largo del pantalón permitía ver los zapatos de Charléne, que en esta ocasión optó por unos altos tacones en color negro con merias transparentes del mismo color. En este contexto, la esposa de Alberto de Mónaco ha sorprendido con una silueta marcada por el minimalismo, algo que ha logrado resaltar con el color.
Por otro lado, otra de las novedades ha sido el tocado. Si bien es más habitual ver a la princesa con sombreros de ala ancha o piezas que le cubren todo el cabello, esta vez eligió presumir su peinado colocando un pequeño tocado en el mismo color del conjunto, con redecilla y dos añadidos de color negro. En este sentido, el recogido la dejaba lucir los pendientes de diamantes de gran tamaño que resaltaban su belleza..
De todas formas, más allá de haber sorprendido con su atuendo color lila fuera de lo normal, Charléne de Mónaco se destacó por su sonrisa en el rostro sereno y relajado que complementa a la princesa.
La inspiración en el look de Charléne
El 23 de mayo de este mismo año, una ciudad española fue sede de uno de los históricos desfiles Crucero de Louis Vuitton. Este año le tocó de local a Barcelona, donde se desplegó un homenaje al país europeo, del cual nació la colección que creó el traje que decidió estrenar la esposa del príncipe Alberto en el Día Nacional de Mónaco.
La parte principal del atuendo, ubicada en la chaqueta estructurada de cintura entallada y cuello de forma circular, fue armada en sarga brillante color lila de mezcla de lana, seda y mohair. Además, los botones metálicos de la parte frontal demuestran que se trata de una versión casi idéntica a la que se encuentra en el mercado de Louis Vuitton, pero de color negro.
En este contexto, la princesa Charléne se destacó por su atuendo, generando sorpresa en todos los medios por el llamativo cambio de look que eligió para esta ocasión tan especial en Mónaco, priorizando la comodidad y la elegancia en color lila.
VFT