El duro momento de la infanta Cristina
La hermana del Rey Felipe aparece poco en eventos públicos como privados.
La infanta Cristina hace algunas semanas estuvo junto a su hermano Felipe VI en una aparición pública, las cámaras captaron a la hermana del Rey sonriente pero manteniendo un segundo plano, lo que si fue raro es que no hubo un saludo de ambos frente a los asistentes al evento. Pero si se los vio juntos luego de haber estado distantes durante mucho tiempo.
Infanta Crsitina junto a sus hijos
La ausencia de Letizia Ortiz, en algunos de los eventos del rey Felipe VI por algunos viajes que ya tenía estipulados en su agenda, hace que las hermanas del monarca vuelvan a tener una presencia institucional junto a él en eventos sobre todo públicos. En lo que a las hermanas respecta la mayor de ellas, Infanta Elena se mantiene alejada de la vida pública, mientras que la Infanta Cristina si ha tenido más presencia sobre todo acompañando a la reina Sofía o incluso a los actuales reyes Felipe VI y Letizia Ortiz.
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La Infanta Cristina con su ya firmado divorcio con Iñaki Urdangarin se empieza a ver un nuevo florecer de la Infanta Cristina, manteniendo su vivienda en Ginebra pero realizando muchos viajes a la capital madrileña para cuidar y guiar a su hija Irene Urdangarin, la cual luego de su paso por el voluntariado en Camboya retorno al país y se encuentra viviendo en Zarzuela junto a su abuela, reina Sofía.
Las preocupaciones de la Infanta
El noviazgo de Irene Urdangarin y Juan Urquijo es uno de los dolores de cabeza que mantiene en vilo a la Infanta Cristina. Luego de no haber podido arrancar la carrera de hotelería en Suiza, siguiendo los pasos de su hermano Juan Urdangarin, Irene Urdangarin viajo a Camboya. Su viaje tenía como destino un voluntariado de tres meses para pensar y definir que deseaba hacer con su futuro.
Irene Urdangarin y Victoria Federica
Al volver Irene Urdangarin definió que se mudaría a Zarzuela para estar con su abuela, reina Sofía. En la actualidad la joven se dedica a sacar el carnet de conducir y pensar en cómo serán los pasos a seguir. La Infanta Cristina al enterarse de este cambio en su hija empezó a preocuparse por el futuro de su está. Su mayor miedo es que la joven siga los pasos de su prima Victoria Federica que se sumergió en el mundo de los influencer. Por lo que la Infanta Cristina decidió que Madrid sería su segunda residencia para poder acompañar a su hija en estos meses que serán decisivos para su futuro.
VDV