¿Qué creés que encuentran las personas más influyentes del medio en CeCé Piumé a la hora de elegir cómo decorar sus casas?
En CeCé Piumé no vendemos objetos: ofrecemos una experiencia que va mucho más allá. Quienes viven de cara al mundo —como muchas de las celebridades y figuras públicas que nos eligen— valoran profundamente el refugio que representa su hogar. Buscan autenticidad, belleza que destaque, objetos con historia y un diseño que emocione.
Creo que encuentran eso: una propuesta estética que también los abraza, que los hace —como ellos— únicos y especiales. Una pieza de CeCé no es solo un mueble o un objeto de decoración; es parte de un relato, en armonía con la naturaleza y la intimidad. También encuentran verdad, calidez, cercanía, valores y simpleza, algo cada vez menos común en este medio. Una marca atendida por su creadora es, también, un otro dispuesto a hacer sus deseos realidad.
¿Cómo lográs combinar estilo, funcionalidad y calidez en cada ambiente para que una casa se transforme en un verdadero hogar?
Desde mis viajes, mi paso por Europa y mi formación en psicología y terapia ocupacional, aprendí que lo sensorial, lo simbólico y lo funcional deben convivir. Cada mueble u objeto tiene una razón de ser: una curva que invita al descanso, una madera que evoca lo familiar, una textura que calma. Para mí, un hogar es un espacio donde todo tiene sentido. El diseño no solo debe verse bien, debe sentirse bien.
¿Cuál es el diferencial de CeCé Piumé que hace que tantas celebridades y referentes de estilo te elijan una y otra vez?
La sensibilidad. El cuidado. El sello de la autenticidad. El respeto por los materiales y por las historias que traen, y por quienes habitarán esos objetos. CeCé no responde a tendencias vacías o banales, sino que propone una estética con profunda identidad. Puede dialogar con distintos estilos, pero siempre logra una armonía excepcional, incluso en la diferencia y la variedad.
Nos eligen porque encuentran verdad. Y porque cada objeto está pensado en el presente, para acompañar y emocionar. Activando del pasado una memoria emocional y siendo parte del baúl de recuerdos que abramos el día de mañana.
¿Qué rol juega el diseño emocional en la elección de objetos o ambientaciones para quienes tienen una vida pública tan intensa?
Un rol central. El diseño emocional no solo se ve: se percibe con todos los sentidos. Quienes viven expuestos y trabajan hacia el afuera necesitan que su casa sea un lugar de reencuentro con lo esencial, con lo verdaderamente trascendental.
Por eso eligen piezas que les recuerden quiénes son, que conecten con su infancia, con sus raíces o con sus anhelos, para sentir con firmeza sus pies en la tierra. En CeCé Piumé trabajamos para volver a darle valor a lo artesanal, con la premisa: que tu casa sea un espejo de tu alma.
¿Podés contarnos alguna anécdota o pedido especial que haya marcado tu trayectoria con una figura reconocida?
Podría contarte varias, pero hay una que me marcó especialmente. Una famosa muy reconocida me había encargado varias cosas para ambientar su casa. Cuando llegamos, ella no estaba. Me comuniqué con su hermana —también muy conocida— y nos indicó por dónde ingresar.
Era un barrio donde yo había vivido, así que le pedí a una amiga que me acompañara. Parecía que estábamos intentando robar: ingresamos por detrás, probamos varias puertas y ventanas hasta que dimos con una entreabierta. Entramos con cierta incomodidad, como quien accede a un lugar sin estar del todo invitado.
Abrimos la puerta principal y empezamos a recorrer la casa, buscando los espacios a decorar: arriba, abajo, cada rincón. En la cocina, mi amiga abrió varios cajones buscando una tijera o un cuchillo. Desplegamos todo lo que habíamos llevado y hasta nos pusimos a hacer contenido y a jugar. Yo, que venía de un mundo más protocolar por mis profesiones anteriores, sentí que trabajar de esto era, de alguna forma, volver a ser una niña a la que invitan a jugar. Saltamos (sin apoyar los pies) en un sillón para hacer un lindo video.
Cuando ya nos íbamos, nos comentaron que probablemente nos habían estado observando, para ver si habíamos logrado entrar. Me morí de vergüenza pensando si vieron nuestro actuar o si creían que habíamos revisado sus cosas. Pero para mi sorpresa, al salir de ahí, me pidieron que fuera directamente a ambientar otra de sus propiedades, en otro barrio. Me pedían que pusiera ese toque tan personal y cálido que habían sentido.
¿Qué tiene CeCé de especial y qué piden las celebridades?
Lo más lindo de CeCé es que no entra a una casa como una marca: entra como energía pura. Como una caricia al corazón de ese hogar. Más allá de los objetos, quienes nos eligen sienten que lo que llega tiene sentido, historia, emoción.
Nos buscan porque saben que no venimos solo a decorar, sino a sumar luz. A crear espacios que abracen, que protejan, que hablen de quienes los habitan. Nos piden lámparas que no solo iluminen, sino que contengan; vírgenes talladas y pequeñas casas de madera que se transforman en altares personales; banquetas macizas, nobles y sin artificios; bancos para entradas y pies de cama que inviten a detenerse y disfrutar del momento.
También diseñamos textiles suaves y envolventes, camas que son refugios, mesas de madera dura estilo campo para celebrar en familia, espejos que reflejan más que una imagen: reflejan un sentir. Ambientamos patios, quinchos, terrazas y galerías para celebrar con otros o para estar con uno mismo. Creamos espacios pensados para transiciones vitales, maternidades, mudanzas, primeros hogares y nuevas etapas.
Nos eligen quienes buscan piezas con alma, muebles que digan algo sin gritar, que acompañen en el tiempo. Y si bien muchos de nuestros trabajos son para hogares que aparecen en las revistas, lo más importante es que también entramos en casas que no tienen flashes, pero sí tienen amor.
Porque CeCé no se trata de fama, sino de esencia. De crear espacios con verdad. De habitar con sensibilidad. Esa es —y siempre será— nuestra razón de ser.
DATOS DE CONTACTO
IG: @ce.ce_piume
Web: www.cecepiume.com.ar




