Analía Franchín reveló hace poco, que le tiene pánico al matrimonio, razón por la cual nunca se ha casado. La exparticipante de MasterChef Celebrity fue sincera y le explicó a la revista Pronto, las razones por las que aún sigue legalmente soltera.
En la entrevista, la panelista de “A la Barbarossa”, le consultaron si es cierto que en el 2009 se casó con su actual pareja, el empresario Sebastián Eskenazi. “No estoy casada, no. Legalmente, no estoy casada porque me da terror el matrimonio. Funcionamos como tal, pero no estamos casados”.
A sus contundentes declaraciones, Analía agregó: “Siempre me dio miedo la formalidad del matrimonio. Prefiero tener que luchar la relación día a día. No relajarme y decir: “Total ya es mío”.
Según las fobias existentes, Analía sufre de gamofobia, que es el “miedo irracional” a contraer nupcias; no obstante, puede tener una relación y un compromiso tradicional, salvo que, al momento preciso de ir al altar, le pasa como a Julia Roberts en “Novia Fugitiva”, que le teme a ese momento y sale huyendo.
“No quiero eso, no me gusta. Ya tuve un intento de matrimonio con un exnovio, con quien teníamos la iglesia, fuimos a las charlas, teníamos la fecha, el catering y el salón pago. Pero suspendí todo y le dije que podíamos continuar la relación, pero no me animaba a casarme”, comentó la presentadora para la fuente.
Analía comentó que cuando va a un casamiento se empieza a sentir angustiada. También agregó que es algo que ya ha trabajado en terapia. “Supongo que tiene que ver con esta cosa de no sentirme claustrofóbica. Lo mismo que me pasa cuando estoy encerrada en un avión y me da terror”.
Analía Franchín contó el extraño toc que padece
El año pasado en PH, Podemos hablar, en uno de los capítulos en los que su amiga Vero Lozano condujo el programa, Analía Franchín estuvo como invitada y confesó que a los 49 años, recién pudo dormir sola por primera vez. Esto se dio debido a que su marido, Sebastián Eskenazi tuvo un viaje de negocios y ella se quedó sola.
“Una vez no encontraba quien me viniera a acompañar y tuve que llamar al jardinero. No había nadie y llamé a mi marido y le dije que iba a llamar al jardinero. ¡Yo necesito que haya otra presencia en casa!”, confesó la panelista entre risas.
Analía Franchín confesó que tiene aún muchos miedos y que los trata en terapia, pero remarcó que debido al toc que sufre y que ha sido alimentado toda su vida, es que le ha costado superar todas las fobias que tiene, entre ellas también, el miedo a estar encerrada o claustrofobia.