Hoy arrancó la nueva y muy renovada versión de la casa de Gran Hermano y Wanda Nara hizo parte de la gana le estreno en una noche donde 18 participantes entraran a la la casa más famosa del mundo para alzarse, luego de varios meses de convivencia pura, con 15 millones de pesos.
Durante la semana, Wanda Nara estuvo en varias oportunidades recorriendo la casa de Gran Hermano, su camarín (409) de los estudios de Telefe y repasando la rutina para la participación de esta noche.
Wanda Nara, una de las figuras hoy por hoy con más presencia en todos los medios de comunicación, fue la encargada de recibir a los 18 participantes del reality de Telefe.
La empresaria y modelo tuvo la oportunidad de hablar con cada uno de ellos, una vez bajaron del auto de Telefe e ingresaron a la casa de Gran Hermano. ¿Quién mejor que ella para dar sus tips de cómo hacer que hablen de cada uno de ellos? ".
Pero la empresaria y expareja de Mauro Icardi no estuvo sola para recibir a los 18 participantes. Wanda estuvo acompañada por Robertito Funes Ugarte, con quien también se mostró muy amiga y hasta compartieron pizza en las pruebas de sonido.
"Estoy muy ansiosa. No puedo creer, me parece que este año Gran Hermano viene recargado. Ya van a ver lo que les digo", comentó Wanda en la previa.
Wanda Nara recibió con mucho carisma y empatía a todos los participantes. Ella le fue dando consejos a cada uno de los participantes, lo interrogó y de paso fue dando su opinión sobre cada uno de ellos.
El rostro de Wanda y de Robertito fueron las dos últimas personas del mundo externo que vieron antes de entrar a la casa de Gran Hermano.
La modelo dejó en claro que tiene mucha cancha y le va muy bien cuando de conducir se trata. Toda su experiencia en los realities en los que estuvo en el país y como panelista en Italia, la aplicó esta noche.
La frase que Wanda Nara más le repitió a todos y cada uno de los jugadores antes de entrar, fue que estaba a punto de ingresar a la casa que les va a cambiar la vida.