Irene Urdangarin, la hija menor de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, vuelve a estar en el centro de la escena, A pesar de haber dado un giro hacia la formación académica en Londres, su comportamiento y hábitos sociales causan gran preocupación a su hermano Miguel Urdangarin, quien le hizo un llamado de atención a su mamá para que intervenga en esta delicada situación.
Tras varios problemas en su etapa escolar en Ginebra y un intento fallido de ingresar en la prestigiosa Universidad de Lausana, Irene decidió hacer una pausa en su vida académica. Este período estuvo marcado por una intensa vida social en Madrid, donde pasó un año junto a su abuela, la reina Sofía, en el Palacio de la Zarzuela. Aunque ese tiempo también incluyó una breve experiencia de voluntariado en Camboya, se percibió más como un viaje personal que como una actividad productiva.
Finalmente, en septiembre, Irene inició una nueva etapa matriculándose en una universidad londinense para estudiar Organización de Eventos. Este cambio buscaba ser un nuevo comienzo, pero las señales de que persisten sus hábitos previos no han tardado en alarmar a su familia.
Desde su llegada a la capital británica, Irene comenzó a llevar una intensa vida nocturna, influenciada en parte por su prima Victoria Federica, conocida por su participación en la escena social europea. Aunque intenta equilibrar sus compromisos académicos con su vida social, los excesos parecen haber comenzado a interferir en su rendimiento universitario.
Miguel Urdangarin le hace un fuerte pedido a su madre para ayudar a Irene
Miguel Urdangarin, quien mantiene un contacto cercano con su hermana Irene, fue uno de los primeros en advertir los problemas que podrían derivarse de su comportamiento. En comunicación constante con su hermano mayor, Juan, quien también vive en Londres, Miguel recibió información de primera mano sobre la rutina de Irene y por eso compartió su inquietud con la infanta Cristina.
E joven teme que los hábitos sociales de Irene terminen afectando su futuro académico y personal. Además, comenzó a circular el rumor de que la joven podría estar considerando abandonar sus estudios, algo que tanto Miguel como el resto de la familia quieren evitar a toda costa.
La infanta Cristina, quien siempre ha intentado proteger a sus hijos del foco mediático, enfrenta el desafío de equilibrar su rol como madre y establecer límites claros, y su figura pública.
VO