Marisa Brel atraviesa un duro momento familiar debido a que su hija mayor, Paloma, debió ser intervenida en el Fleni luego de ser diagnosticada con un cuadro de hidrocefalia seguido por un pequeño tumor en el cerebro.
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"Veníamos observando con mi marido que Paloma no se movía bien, que temblaba...estabamos pendientes por el tema de la alimentación, pensando que se debía a alguna cuestión alimentaria. Yo estaba convencida de que estaba anémica...empezamos a preocuparnos", relató Marisa esta mañana en diálogo con Los ángeles de la mañana. "Se había caído dos veces sin perder el sentido", agregó al respecto.
Preocupada, Marisa y su marido decidieron llevarla a una neuróloga que fue la que le ordenó una resonancia donde le detectaron líquido en el cerebro y debió ser derivada al Fleni. "Fue una pesadilla, ella supo todo desde el primer día", dijo Marisa. "Lo agarramos justo, fue un milagro", aseguró.
Tras varios días de incertidumbre y luego de la operación, la familia tuvo el primer respiro. "Le hicieron una perforación en el cráneo para drenar el líquido, pero el tumor quedó ahí porque está rodeado de todo el sistema nervioso...es chiquito y la oncóloga me confirmó que ni siquiera hay que tratarlo con medicación", reveló Brel. "Hay que estudiarlo por imágenes cada tres meses, nada más", agregó al respecto.