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De los últimos 100 años, estos son los más destacados y elegidos para vivir hoy día.
*Estilo minimalista: Se caracteriza por la utilización de líneas simples, colores neutros como el blanco, negro y gris; y la eliminación de adornos y detalles superfluos.
*Estilo industrial: en este caso usamos de materiales como el metal, el ladrillo y la madera rustica, así como por la presencia de elementos como tuberías, vigas y maquinaria expuestas.
*Diseño nórdico: se basa casi exclusivamente en materiales naturales como las maderas locales y el ratán, así como el lino, el algodón y el cuero, que se complementan con colores sencillos como el blanco, el gris o el beige. A la hora de amueblar la casa, los acentos solo se ponen con tonos pastel claros. Funcional y elegante.
*Estilo japandi: una combinación de elementos de diseño japoneses y escandinavos. Sin embargo, la diferencia con el aspecto puramente Skandi es que se pueden utilizar tonos cafés más oscuros en el hogar, especialmente cuando se trata de madera. Porque en general, la influencia japonesa permite un uso más generoso de tonos como el negro, el verde oscuro, el terracota o el berenjena, además de tener en consideración el Feng Shui.
*Estilo Boho chic: se refiere a un estilo de decoración muy versátil en el que casi todo se vale. Los muebles nuevos pueden mezclarse con hallazgos de mercadillos de pulgas. En cuanto a los materiales naturales, se elige, los no tratados, como la madera, el ratán, los tejidos acogedores de algodón, mohair y lino, y los colores resultantes, beige, café y oliva. En el hogar, los acentos pueden ponerse fácilmente con amarillos brillantes, azules y llamativos motivos étnicos, flecos salvajes y bordados deslumbrantes. Técnicas como el batik y el macramé permiten crear tus propios proyectos, como hamacas, tapices o canastas colgantes, para que al final el estilo boho sea sobre todo una cosa: personal e individual.
*Estilo mediterráneo: la base está formada por colores claros como el blanco, el beige y tonos terrosos como el verde oliva, el terracota y el ocre, que pueden complementarse con frescos toques de color de amarillo cálido, naranja y azul ultramar. Los materiales más populares son la arcilla, la rafia y el lino, así como las maderas regionales del olivo o el pino. Para el suelo y las paredes, son especialmente adecuados los mosaicos de colores o los azulejos hechos a mano.
*Estilo Rustico: Se caracteriza por utilizar materiales naturales y elementos de la naturaleza, como la madera, la pierda y el hierro forjado, para crear un ambiente acogedor y cálido con un toque rural.
*Estilo clásico-moderno: De líneas simples y muebles de madera oscuro, se completa con ornamentaciones muy destacadas como cuadros, alfombras y arañas de gran imponencia y veladores con cristales que acompañan a la principal.
