Flor Vigna se mudó hace casi dos meses y decidió reestructurar por completo el lugar que escogió para vivir. La bailarina de 26 años cambió totalmente su nueva casa y renovó totalmente cada rincón a puro lujo y confort.
En la remodelación integral de cada espacio se planificó la colocación de nuevos revestimientos, instalación de porcelanatos y griferías, así como también la refacción de la decoración de interiores en los distintos sectores.
La cocina de la actriz pasó de ser un lugar abandonado y oscuro a ser uno de los sitios con más claridad de su residencia. Allí todo combina con el blanco de las paredes y piso y los artefactos eléctricos plateados rompen con el total white.
En el caso del baño, el área más íntimo del domicilio de la artista argentina, cuenta con los sanitarios y accesorios más destacados. Aquella parte de su residencia tiene mucha iluminación y la bañera con hidromasaje caracteriza la sección.
Para su habitación, la influencer decidió remover el suelo y lo cubrieron de pisos vinílicos. El cuarto tiene un gran espejo y es el compartimiento más amplio; tiene salida al balcón y un considerable placard en el que guarda sus pertenencias.