Compartí esta nota
El reconocido rapero estadounidense Symere Woods, conocido como Lil Uzi Vert, cumplió un sueño que tenía desde que era niño: Incrustarse un diamante en la frente. Para darse el gustito, Lil, desembolsó la friolera suma de 24 millones de dólares.
El joven de 26 años, lleva una vida excéntrica y ostenta una importante colección de autos, todos de altísima gama. Además cada paso que da, es acompañado por un séquito de guardaespaldas.
La valiosa pieza, se la compró a Elliot Eliantle, un reconocido joyero que provee a los integrantes del mundo del rap. Es un diamante natural y según el Instituto Gemológico de América, no fue cultivado en laboratorio.
Según sus propias afirmaciones, viene ahorrando dinero desde 2017 para cumplir su sueño ya que ni siquiera con la venta de su Bugatti ni de sus otras valiosas propiedades, podía alcanzar el valor de la pieza.
El músico que compartió escenario con Ed Sheeran entre otros destacados, tuvo que someterse a un piercing intradérmico, tal como lo hizo con los otros 2 diamantes que tiene incrustados en sus pómulos y cuyo valor oscilan en los 250.000 dólares.
A diferencia de las piezas que ya tenía, en este caso fue diferente la intervención, dado que se trata de una piedra de mayores dimensiones, por lo que le tuvieron que hacer 2 incisiones y colocar una barra de titanio atornillada al diamante para que éste se sostenga.
La cicatrización total le llevará alrededor de 9 meses y para que esto suceda correctamente y evitar queloides o infecciones, tiene que tener mucho cuidado al higienizar la zona, con solución salina, además de evitar todo tipo de impactos.
Symere confesó que éste era un sueño que tenía desde que era muy chico y por la satisfacción de haberlo logrado, lo compartió con sus más de 24 millones de seguidores de Twitter e Instagram.
Sin embargo, algunos detallistas comentaron que la pieza no está bien alineada a lo que el joven contestó que cuando cicatrice y baje la inflamación, quedará como él lo había pedido.
Su próximo paso es continuar ahorrando para sumar más piedras preciosas a su cuerpo y así convertirse en una joya viviente.
