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Gerardo Morales (64), actual Gobernador jujeño y Precandidato a la Vicepresidencia de la Nación por Juntos por el Cambio (como compañero de fórmula de Horacio Rodríguez Larreta) y su mujer, Tulia Snopek (49), sostienen y miman a Guadalupe, la hija que comparten que ya tiene un año y diez meses. En tiempos de campaña aprovechan el poco tiempo libre que les queda, ya que el político radical recorre todo el país con una agenda muy exigente.
“La contención de mi familia me da paz, fortaleza espiritual y orden interno, fundamentales para ejercer todavía el Gobierno de Jujuy y encarar una difícil campaña”, afirma Morales. “Lo acompañamos mucho, todo lo que podemos. Tratamos de mantener la familia físicamente junta”, dice la abogada, que celebró el cumpleaños de Gerardo el martes 18 dedicándole unas amorosas palabras: “Feliz cumple amorcito lindo. Qué Dios te bendiga y te proteja siempre, que te dé salud y una vida larga, para que puedas estar para Guadalupe. Vos sos lo único que necesita para crecer sana y feliz. Te amamos hasta el infinito”.
Tulia también se refirió a la fórmula que Gerardo Morales formó con Larreta: “Significó un acto de grandeza, dejando atrás cualquier construcción personal. Esta fórmula es la combinación perfecta para sacar adelante el país. Son personas transparentes, con gran experiencia en gestión. Gerardo le aporta federalismo, y un conocimiento acabado de las necesidades de las provincias y de las soluciones”.
Gerardo Morales y Tulia Snopek le inculcan a su hija los principios patrióticos de Belgrano
Mientras “Guada” da sus primeros pasos en las pintorescas y empinadas callecitas norteñas, y acaricia a Tina, la Shar Pei que es mascota oficial de la familia, Gerardo Morales y Tulia explican cuáles son los ideales que intentan transmitirles a su hija.
“La importancia de la honestidad, la ética y el servicio público, valores que Manuel Belgrano encarnó a lo largo de su vida. Para que igual que ese Prócer, ella pueda ser una ciudadana comprometida, honesta, empática y dispuesta a construir un país mejor para todos”, dijeron sobre el proyecto de su crianza.
Por su parte, la mamá agrega las cosas que le enseña a Guadalupe: “Le inculco los valores cristianos católicos apostólicos romanos, la fe, el amor al prójimo. Le enseño a rezar: todas las noches rezamos al Angel de la Guarda y a la Virgen María”.
Y por supuesto, Gerardo Morales y su esposa coinciden en que aprenda desde chica a amar y respetar los símbolos patrios, en especial la bandera. “Porque es un legado de Belgrano, que nos legó también la bandera de la libertad civil y tuvo una participación fundamental en el éxodo jujeño”. La niña acepta que el solcito del atardecer acaricie su inocencia, mientras sus padres la miran orgullosos. “Deseamos que Guadalupe en el futuro elija el camino que la haga más feliz y pueda formar una familia llena de amor”, concluyen.
Fotos: Sebastián Alfaro
