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El pasado 4 de setiembre, pasadas las 23:00 arribó a la provincia de Jujuy, proveniente de Colombia, Ivanka Trump (37), la hija mayor del presidente de los Estados Unidos, junto al subsecretario del departamento de estado, Doctor John Sullivan y una importante comitiva, con el objetivo de conocer y financiar diferentes proyectos vinculados al fortalecimiento y empoderamiento de las mujeres.
Muy elegante, con un vestido color turquesa de tafetán con detalles en dorado en la falda, completó su look con aros dorados que se engamaron perfectamente con su estilo. Recibida en el aeropuerto por el Gobernador de la Provincia, Gerardo Morales y su esposa, Tulia Snopek, quien también está comprometida con la causa, el ministro Guillermo Dietrich y representantes de diferentes organismos jujeños, la hija de Donald fue llevada directamente al Hotel Howard Johnson donde se alojó en la suite principal y, después de una cena liviana, se fue a descansar.
A la mañana siguiente, camino a Purmamarca, visitó fundaciones y proyectos de mujeres artesanas y conversó con ellas acerca del rol de las mujeres, su fortalecimiento y empoderamiento, el trabajo que realizan cada día y su dinámica social en la provincia. Para la ocasión eligió un vestido estampado con tonos primaverales, lazo y totalmente despojada de joyas, siempre respetando el largo de las faldas según protocolo. También conversó con mujeres de comunidades originarias y tuvo una íntima charla con Natalia Sarapura, ministra de desarrollo humano de la provincia, quien proviene de los pueblos originarios y se mostró interesada en seguir acompañándolas ya que el gobierno de EEUU impulsó un plan de microcréditos para estas entidades. Ivanka quedó maravillada con los paisajes y destacó la quebrada y el cerro de los 7 colores: “Estoy impactada con la belleza de este paisaje”, le confesó al gobernador.
A la hora del almuerzo, eligieron el lujoso hotel “El Manantial del Silencio” y el menú consistió en una entrada de ensalada de queso brie con pera, mix de verdes, tomate cherry, almendras y vinagreta de manzana y menta. El plato principal consistió en lomo de novillo, ensalada tibia de vegetales grillados y chimichurri. De postre, crême brûlée y tomaron vino de altura de la bodega Dupont de Maimará. Más tarde, Ivanka recorrió los jardines del lugar y se sorprendió por las llamas que estaban al ingreso del hotel. Después de una cálida despedida, Ivanka y su comitiva partieron directamente al aeropuerto para dirigirse a Paraguay, el próximo destino.
