Mientras en Madrid se celebraba la Cumbre de la OTAN, Letizia Ortiz ofició como anfitriona de la agenda paralela, el programa de acompañantes de los mandatarios que han asistido y que tuvo variadas actividades en las que la reina se ha lucido con sus propuestas de estilismo.
En especial, porque la monarca ha optado por llevar varios diseños "Made in Spain" y que han puesto en valor el diseño local. Entre los guiños a su cultura, en dos oportunidades la esposa de Felipe VI eligió prendas con el característico estampado a "lunares" (influenciados por la cultura del flamenco, por supuesto).
Además, en una de sus propuestas ha elegido usar alpargatas o mejor dicho "espadrilles", termino que toma su nombre de la palabra catalana, espardenya, utilizada para describir los zapatos de lona con suela de yute usadas por los campesinos del siglo XIV en los Pirineos.
Fundada en 1927, Castañer fue una fábrica familiar de este tipo de zapatos que se encargó de realizar el calzado de los soldados durante la Guerra Civil española. Luego, trabajó con firmas como Lanvin, Hermès y Christian Louboutin, y fabricó por primera vez los famosos espadrilles con tacón de cuña para Saint Laurent en los 70's.
El vestido fucsia de Carolina Herrera que tan bien le sienta a la reina
En el último día de la agenda paralela de la cumbre de la OTAN, la reina Letizia se lució con un modelo en color fucsia by Carolina Herrera, con el que acudió al Teatro Real de Madrid.
Se trata de un diseño con la que la pudimos ver por primera vez en junio de 2018, en su visita de Estado a Estados Unidos. Fue creado especialmente por la firma para dicha ocasión.
El vestido de Carolina Herrera con silueta corola y una falda midi evasé se destaca por ser entallado y llevar botones en el pecho como detalle. Una silueta de las que mejores le sientan a Ortiz. Además, acompañó esta propuesta con zapatos y cartera de Magrit en tono neutro.
En cuanto a las joyas, ha elegido unos aros de aro de oro amarillo y el anillo by Karen Hallam.
Un diseño aragonés en tono negro para la cena de gala
¿Qué mejor para la cena de gala en el Palacio Real que ir de sobrio negro? Muchos dirán que es lo más "obvio", sin embargo Letizia se lució con esta apuesta del diseñador aragonés Antonio Burillo. Y fue para nada aburrido, por el contrario fue impactante.
Se trata de un elegante y sencillo vestido de tafetán negro de "The 2nd Skin Co.", la firma que Burillo tiene junto al cordobés Juan Carlos Fernández, y que la reina lució previamente en la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias el pasado mes de octubre.
De corte minimalista en la parte superior, se contrasta con la falda midi hasta los tobillos, y de gran volumen. El detalle son los lazos que adornan la parte delantera del diseño y que, por otro lado, recuerda a la silueta de 'New Look' de Dior.
Para un golpe efectivo, la monarca acompañó su outfit con un brazalete de diamantes y aros a juego. Llevó también zapatos en tono negro con transparencias.
La reina de España y clásicos lunares para "La Granja"
Letizia dio un paseo por La Granja de San Ildefonso junto a las primeras damas y luego visitaron el museo Reina Sofía. Para las mencionadas actividades, escogió un look cómodo y con guiño a su cultura: un vestido a lunares que ha estrenado en esta oportunidad y que le quedaba impecable.
Se trata de un vestido camisero en brocado de algodón en color taupe con detalles en devoré, cinturón con hebilla redonda a juego y que termina en una falda de tipo evasé. El diseño de la murciana Laura Bernal. Sí, una vez más apuesta por una firma española, por supuesto.
Así mismo, Letizia le sumó su calzado fetiche, los espadrilles. Particularmente unos de Macarena, una marca española que es de sus preferidas: en color crudo con cuña alta y plataforma.
Letizia, de punta en blanco
La reina se reunió con Jill Biden en el Centro de Atencion, Acogida y Derivacion de Refugiados Ucranianos en Pozuelo de Alarcón. Ortiz eligió para esta ocasión un impoluto traje blanco de Carolina Herrera que usó por primera vez en 2018, durante la presentación del Diccionario Biográfico Electrónico (DBE), y cuatro años después lo ha desempolvado de su armario. Se trata de un conjunto de chaqueta entallada con bolsillos y botones en los puños, y pantalones palazzo.
En aquel entonces lo llevó con un top blanco; sin embargo, esta vez sumó una blusa de seda en rosa con drapeado en el escote, firmado por Hugo Boss, y aunque es la primera vez que se la vemos en público, es de una colección de 2015.
Además, la Reina ha elegido unos originales zapatos en el mismo tono que usó por primera y única vez en Canarias, durante una visita oficial. En color morado, presentan punta fina, tiras cruzadas y taco ancho.
En cuanto a joyas, Letizia ha elegido unos discretos aros, en forma de tres hojas lapidadas del joyero José Luis. También sumó el anillo de Karen Hallam, que es un clásico de su estilo.
Más lunares para Ortiz
La primera dama de los Estados Unidos, Jill Biden, fue una de las primeras invitadas en llegar a Madrid y la esposa de Felipe VI la recibió en el palacio de La Zarzuela el lunes por la mañana.
Para la ocasión, la monarca eligió un vestido negro a lunares blancos del diseñador español especializado en moda flamenca, José Hidalgo.
Del diseño, se destaca el efecto "degradado" en su estampado: con lunares en mayor cantidad sobre al cuerpo que disminuyen mientras descienden hasta el bajo del modelo.
De falda recta y hombros ligeramente marcados, esta propuesta fue por más sentadora para la reina, que completó su look con zapatos by Carolina Herrera, de tacón alto fino, y que ya ha lucido en reiteradas oportunidades.