Silvia Rodríguez, la ex cuñada de Nazarena Vélez, falleció por una hemorragia interna tras realizarse una abdominoplastia en una clínica de Colombia y fue el especialista Rafael Redondo quien se hizo cargo de la intervención.
Según su entorno, la cantante estaba obsesionada con las cirugías y hasta realizaba polémicas dietas para no aumentar de peso. Por este motivo, es que comenzaron a correr diferentes rumores acerca de este tipo de intervención y muchos aseguraban que los médicos norteamericanos se negaron a realizarla por que la consideraban riesgosa.
Sin embargo, Rafael Redondo dio su versión de los hechos y aseguró que el procedimiento utilizado fue el correcto y que la hemorragia se produjo días después de la operación. “Ella vino a hacerse una cirugía con todas las medidas de seguridad. Salió y hasta el día 10 del postoperatorio estuvo en excelentes condiciones. En ningún momento hubo complicación, por lo que se le dio el alta para volver a Miami”, aclaró el cirujano en una entrevista para Intrusos.
De acuerdo a su testimonio, Silvia sufrió una descompensación en el aeropuerto por lo que volvió de urgencia a la clínica. “Tuvo un síntoma de hipotensión en el Aeropuerto, la voy a buscar y la lleva al Sanatorio. No pueden controlar el sangrado. Le hacen una cirugía abierta. Pasa a terapia intensiva, no llega a estabilizarse y fallece”, aclaró el profesional y aseguró que el verdadero motivo del deceso fue por una úlcera sangrante duodenal.
Para tratar de evadir cualquier responsabilidad, Redondo aseguró que esta complicación es producto del estrés y el consumo crónico de medicamentos. "Nosotros no le hicimos una terapia invasiva. Ella estaba obsesionada por su cuerpo”, reveló.
La madre de Silvia, Inés González Bellini, también dio su doloroso testimonio que fue difundido por la periodista argentina Verónica Stefani. “Ella de la operación salió bien. Estaba dolorida porque se cosió los músculos del vientre a la piel. Y eso es muy doloroso... Silvia estaba con muchos dolores, y deben ser por la úlcera que la estaba afectando. No quería comer, decía que la comida le daba asco. Quería verse más flaca”, aseguró la mujer.