Aunque la partida de Matías Defederico a España a buscar nuevos rumbos futbolísticos despertó mensajes de amor por parte de Cinthia Fernández hacía él en una publicación de Instagram, la realidad es que la modelo y bailarina esta separada del jugador de fútbol hace dos semanas. La pareja enfrentó otra crisis que no pudo superar y por decisión de él por ahora el matrimonio está terminado.
Ella se encuentra en Villa Carlos Paz brillando en la obra Mahatma junto a sus tres hijas, las mellizas Bella y Charis y Francesca y él está intentando acordar su incorporación a un importante equipo de la segunda división del fútbol español.
Si bien Cinthia no ha ratificado su separación en conversación con Involucrados- donde reconoció la crisis- sus íntimos cuentan que se refugia en el trabajo y su familia para llevar adelante este mal momento.
"Yo lo amo y él me ama y la voy a pelear a muerte, pero yo paso un montón de tiempo sola como él. Tenemos ganas de quedarnos en un lugar y no nos pasa, somos una familia nómade. En el 2017 tuvimos tres mudanzas", explicó en la tv.
"Estoy en crisis, él se fue tres días a España. No pasó nada que no se pueda resolver, obviamente estoy triste, pero prefiero decir que estoy pasando un mal momento", agregó la artista del espectáculo de Flavio Mendoza.
Además, dijo: "Él no se mandó ninguna cagada como otras veces, los motivos son personales", recordando que en anteriores oportunidades hubo peleas por terceros en discordia. "Más sincera no puedo ser, esto es lo que me pasa", sostuvo entre lágrimas.
Luchadora como pocas, ella no quiere separarse y está haciendo lo imposible por recuperar su matrimonio, por eso quizás su contundente mensaje en Instagram hace unos días: “Buen viaje que seas feliz siempre te vamos a extrañar papá! Te amamos. Mamá cuida de nosotros gracias por ser un gran papa”. ¿Qué pasará en un futuro cercano? Por el momento y aunque lo nieguen Cinthia y Matías está separados. Los motivos sólo los conocen ellos pero la verdad salió a la luz quizás en el momento menos pensado cuando la distancia geográfica entre ellos hace que sea imposible “pelearla” juntos.