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El centro médico sabe de lo importante que es para el cuerpo estar saludable, por eso buscan a través de sus tratamientos luchar contra el sobrepeso. “Este no es un objetivo sino una consecuencia. Se debe al cambio de hábitos que se logra al vivir la experiencia saludable y educativa diseñada por la institución en estadías de 7 días o más”, asegura la Dra. Mariana Tortolo, especialista en Obesidad.
Según la profesional, la primera clave es abandonar las dietas restrictivas. “El dietante crónico, fracasa, ya que al pasar toda su vida o gran parte de ella sufriendo hambre, su metabolismo va a activar mecanismos de ahorro, uno de ellos puede ser la activación del “Thrifty Gene”, y este fenotipo puede llevarnos a sobrepeso u obesidad. Lo que haría muy difícil el descenso de peso”, afirma.
Siguiendo con la línea recalca la importancia de elegir a conciencia los alimentos, comenzando a reemplazar de a poco la comida rápida, por alimentos saludables y nutritivos. A eso se le suma una tercera cuestión que es identificar que es lo que nos llevó a esa situación de sobrepeso.
“El aumento de peso puede estar relacionado con episodios de stress, enfermedades postrantes, o cuadros de depresión. Una buena estrategia es visualizar desde cuándo cambio nuestro metabolismo, para poder mediar sobre neurotransmisores como la endorfina y la noradrenalina que se elevan y generan un círculo vicioso en el organismo”, afirma Tortolo.
Cuidar la digestión, es otra de las claves para seguir en el camino de la salud para nuestro cuerpo. “Tenemos que tener en cuenta que hay receptores cerebrales del apetito y diferentes tipos de hambre. Se debe cumplir ciertos aspectos fundamentales como: masticar bien y lento para cumplir el primer paso de la digestión, deglutiendo un alimento más fácil para el estómago, hígado, vesícula y páncreas, quienes preparan el bolo alimenticio para nuestros intestinos”.
También la profesional recomienda bajar la ansiedad, dado que este padecimiento esta muy vinculado con la suba de peso, además de ser perjudicial para la vida diaria. Mariana, le suma un factor crucial, y que al que se le presta poca atención: el estar hidratado. “El tejido graso retiene agua y toxinas. Por eso mismo, hay que consumir abundante agua, frutas y verduras que nos ayudaran a eliminar los desechos corporales y nos mantendrán la piel sin sequedad y por lo pronto menos arrugas”.
Por último, destaca el estar siempre estar en movimiento, permitiéndole al cuerpo estar activo y sano. “El peso corporal no nos permite movernos plácidamente ya que el aumento del flujo sanguíneo para la digestión con ingesta copiosas, va a sacarnos flujo muscular y con ello el ácido láctico, necesario para movernos. Nuestro cerebro también va a tener menos flujo sanguíneo y ello nos llevara a tener somnolencia en lugar de fosforo que lo active”, concluye la profesional.
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