Llevo una vida creativa que me hace crecer continuamente tanto en lo personal como en lo artístico. Tengo el privilegio de acompañar a las personas continuamente a través de mi arte. FORREST MATES es un emprendimiento que traslada la sensibilidad de la pintura a cada uno de sus mates u obras, utilizando el arte como técnica de expresión.
Para mí lo más importante es confiar en la capacidad que tenemos de crear lo que queramos. También estoy segura de que llevar una vida creativa no es nada fácil. Es un desafío personal, de mucha introspección para poder planificar el proyecto, experimentarlo a través de cada pincelada que damos y por última compartir con las personas la obra terminada.
La creatividad nos permite hacer cosas increíbles. Es importante poder frenar nuestra vida cotidiana, para dejar marcha libre a nuestra parte artística. Lo ideal para mi es tener hábitos creativos, tener un rincón de tu casa que te conecte con tu esencia, que te ayude a dejar volar la imaginación; dar paseos “creativos” para poder observar en la misma naturaleza distintas texturas, formas, paletas de colores y patrones; escuchar a otros artistas que hablen de su forma de ver el arte; observar detenidamente otras obras y pinturas que te pueden disparar nuevas ideas. Los viajes también ayudan mucho a despejar la mente y ver cosas nuevas, que muchas veces suelen ser inspiradoras. Hacer el ejercicio de escribir lo que se nos ocurre, plasmar las paletas de colores y dibujar lo que tenemos en mente ayuda mucho a definir ideas.
La vida creativa es un viaje, un largo proceso. Es un camino de mucho aprendizaje, con errores y aciertos. Cada uno vive la vida creativa a su manera y de esa forma le aportamos al mundo una belleza única. La clave es confiar en lo que hacemos, dejando de lado el miedo (que por supuesto todos tenemos) para así poder crear libremente. De esa forma casi sin darte cuenta, miras para atrás, desde el momento en que empezaste hasta hoy en día y ves todo lo que creciste. Personalmente pensaba que los grandes artistas eran personas distintas, enviadas del más allá, con el tiempo me di cuenta que el arte en sí, es una expresión y todos expresamos sentimientos e ideas, ya sea en pequeñas cosas de la vida, que muchas veces pasan desapercibidas, como también en las grandes obras que hacemos. Creer en nosotros mismos es abrir la puerta de la confianza que nos va a ayudar a crecer y ver el mundo con otros ojos. Deseo que encuentren aquello que los haga perder la noción del tiempo y que se animen a crear libremente.