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Horas críticas se viven en Barcelona luego de que Lionel Andrés Messi oficializara sus ganas de irse del FCB. A sus 33 años, el jugador argentino es considerado el primer contribuyente de España por los impuestos que paga por sus propiedades y fortuna.
Es por eso que, ante esta noticia impactante de su renuncia al club catalán, es inevitable pensar en la propiedad que el rosarino deberá abandonar de efectivizar su pase a una nueva institución.
Según la lista de Forbes gana más de 45 millones de dólares por año sólo por jugar al fútbol ya que además tiene ingresos incalculables por sus contratos millonarios con más de 10 de las más importantes firmas del mundo, entre los que se destaca el que tiene con Adidas –en donde ya lanzaron su propio modelo de botin– por el que cobra 20 millones de dólares por año y le asegura el mismo ingreso por 7 años más.
Su patrimonio total está calculado en alrededor de 280 millones de dólares. De concretarse la finalización de su contrato con el Barcelona, es menester resaltar la existencia de una cláusula de 700 millones. Y, como el mismo “Lio” repite en cada ocasión, todo lo que gana lo dedica al disfrute con su familia.
Su mujer, la bella Antonella Roccuzzo (32), y sus tres hijos, Thiago (7), Mateo (4) y Ciro (2) son su gran pasión fuera de la cancha. Y ellos fueron la gran razón por la que el astro del fútbol mundial decidió comprar la gran mansión ubicada en la exclusiva urbanización Bellamar, de Castelldefels en 2009.
Por la propiedad ubicada a 20 kilómetros de Barcelona y a 19 del estadio Camp Nou, sobre un terreno de 10 mil metros cuadrados, habría pagado 2 millones de euros. Pero a partir de allí comenzaron las refacciones que llevarían varios meses y en los que terminaría invirtiendo 4 millones más. La casa fue remodelada en un claro estilo minimalista que no denota todo el lujo de cada uno de sus ambientes.
Con una construcción que en algunos puntos imita un claro estilo mediterráneo por sus tonos claros y sus pisos de madera. La casona está rodeada por escalinatas y grandes terrazas que según su orientación ofrecen vistas panorámicas a las montañas de Garraf y al mar Mediterráneo. También en su último piso tiene un Mirador para observar desde allí los mágicos amaneceres y atardeceres. Toda la propiedad está rodeada por frondosos jardines. Los ambientes fueron decorados en diferentes tonos ocres aunque predomina el color beige que está combinado con papeles que revisten las paredes. Los pisos de oscura madera reinan en cada habitación.
Una gigantesca cocina de concepto abierto sirve para reunir en cada mediodía a toda la familia. También tienen su desayunador, un amplio living con sillones tapizados en pesados terciopelosy hasta un gran salón para mirar televisión, en donde está el inmenso sillón en forma de L en donde el jugador ama “tirarse” a descansar y hacer una pequeña siesta junto a alguno de sus hijos o al gigante perro Hulk.
Cada habitación del piso superior cuenta con su toilette y la de Antonella además tiene ungigantesco vestidor con grandes espejos, sillones y zapateros. Una sala especial tiene sus paredes cubiertas por sus camisetas de fútbol más emblemáticas y por las de los amigos jugadores más importantes de todos los tiempos. También tiene biblioteca, sala de estudio para los niños y un gran ambiente para juegos.
Además, hay dos piscinas con grandes espacios con reposeras para descansar y tomar sol. Una zona especial en el jardín está reservada a la parrilla o la hora de “la barbacoa” en la que la familia se reúne con las de otros jugadores que viven en la misma zona. Para entrenar y jugar con sus hijos, Lio hizo construir una cancha de fútbol profesional aunque un poco más chica que el estadio Camp Nou.
En 2013, cuentan que después de “pelear” con unos molestos vecinos que alquilaban su casa los fines de semana decidió finalizar el litigio y lograr su total privacidad y la ansiada paz familiar comprando la propiedad vecina y agrandó su terreno. También dicen que se vio en medio de algunas discusiones con las autoridades del Aeropuerto de Barcelona, que se encuentra a sólo 10 kilómetros de su casa, porque no se pueden extender debido a la gran cantidad de vuelos que tienen y ningún avión puede volar sobre su propiedad.
