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Editor de Protagonistas, música y Lifestyle.
Juan Cruz Cabral Lodoli
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Claudia Schiffer hoy está cumpliendo 50 años y se consagra como una nueva leyenda de la moda mundial. La alemana fue "El" descubrimiento de Karl Lagerfeld en los noventas, década que la vio convertirse en la más top de las top models y ser la cara publicitaria de un sinfín de firmas del mundo. Desde ese entonces, se la catalogó como una estrella y, además de su trabajo, su privacidad comenzó a copar las mejores portadas de las revistas.
Quienes han trabajado con ella la recuerdan como muy profesional, puntual y detallista. Ella se ha ocupado de cuidar su imagen, de preservar esa ingenuidad y sencillez que le acompañó a lo largo de su carrera. Durante años, sus 1,82 centímetros de altura, ojos azules, pómulos marcados y su sonrisa, conquistaron las pasarelas del mundo.
También en esa década dorada de la moda, Schiffer abanderó la poderosa armada de “top models” junto a Naomi Campbell, Cindy Crawford, Christy Turlington, Helena Christensen y Carla Bruni. También existió un mito que aseguraba un enfrentamiento con Valeria Mazza. Tiempo después, ambas lo dejaron atrás y se mostraron muy cómplices en los front row de los desfiles más exclusivos del mundo.
La vida de Schiffer, hoy está centrada en una faceta empresarial con una línea de productos cosméticos y algunas colaboraciones con firmas pequeñas que le gustan, aunque también ha participado en proyectos de lujo como alguna sesión de fotos para Chanel. Ahora vive la moda desde otro ángulo: a través del diseño. Ha creado una colección cápsula de prendas básicas, que reflejan “su estilo personal sin esfuerzo”.
Su carrera de modelo arrancó a los 17 años mientras bailaba con un grupo de amigos. Michel Levaton, director de la agencia de modelos Metropolitan, se le acercó y le preguntó si quería ser modelo y ese fue el punta pie de la carrera de una de las supermodelos más conocidas del mundo.
Dentro de sus romances más mediáticos, se destacaron los seis años de amor con el mago David Copperfield. Más tarde, se casó en 2002 con el productor cinematográfico Matthew Vaughn con quien tiene tres hijos y vive feliz en una casa de campo en el pueblo de Oxfordshire (Inglaterra). “Yo soy una mujer sencilla, no tengo nada especial, me siento como una mujer normal”, ha resumido su estilo de vida.
La última vez que la vimos en pasarela fue en 2018 en homenaje global que se le ha rendido a Gianni Versace en el vigésimo aniversario de su muerte. Allí también se pudo ver al clan de "super modelos", una vez más y fue el boom que resaltó su actual vigencia.
