Miguel Urdangarin, en la mira de la Casa Real: qué pasó

En un giro inesperado, la Casa Real española decidió tomar cartas en el asunto respecto al comportamiento de Miguel Urdangarin, el hijo de la infanta Cristina. Después de varios episodios que llamaron la atención de los medios y la opinión pública, Felipe VI intervino directamente para pedir que se ponga orden en la vida del joven, quien actualmente vive en Madrid, lejos de la formalidad que caracteriza a la familia real.

A lo largo de los últimos meses, los hermanos Urdangarin, Irene y Miguel, vienen protagonizando varias situaciones que han preocupado a la Casa Real. Irene, al no superar las pruebas de acceso a la universidad de Lausana, decidió tomarse un año sabático y mudarse temporalmente a Zarzuela, donde fue recibida por la reina Sofía. Poco después, Miguel, quien había estado entrenando para ser monitor de esquí, se vio obligado a abandonar su formación debido a una lesión. Sin mayores planes inmediatos, optó por instalarse en Zarzuela, en un entorno que no estaba preparado para recibir a más jóvenes en busca de refugio temporal.

Las tensiones de la Casa Real con Miguel Urdangarin

Esta situación generó tensiones dentro de la familia real. Felipe VI y la reina Letizia no vieron con buenos ojos las visitas frecuentes de los Urdangarin, considerando que esto podría comprometer la seguridad y la privacidad de la residencia real. A pesar de que la reina Sofía siempre mantuvo una relación cercana con sus nietos, los reyes actuales temen que el comportamiento de los jóvenes termine siendo un foco de atención indeseado, al igual que lo fueron Victoria Federica y Froilán, los hijos de la infanta Elena.

Con estas preocupaciones en mente, Felipe VI hizo un claro reclamo a su hermana Cristina, pidiendo que los jóvenes se alejaran de Zarzuela y buscaran su propio camino. Así fue como Miguel e Irene decidieron mudarse a Reino Unido, donde el joven, quien finalizó sus estudios en Ciencias del Mar en Londres, aún no ha logrado encontrar trabajo.

Aunque en un principio se dedicó a realizar prácticas, la empresa en la que trabajaba no renovó su contrato. Actualmente, vive de forma relajada, viajando entre Londres y Madrid, y aprovechando su tiempo libre para disfrutar de la vida.

Ante esta situación, Felipe VI no dudó en hacerle llegar un primer llamado de atención a la infanta Cristina, pidiendo que su hijo se centrara en su vida profesional y personal. La Casa Real, consciente del poder que tienen los medios de comunicación y el interés que genera la familia real, teme que Miguel termine siendo otro blanco mediático como sus primos, algo que desean evitar a toda costa.

VO