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La reina Letizia llegó a Los Ángeles para desarrollar una nutrida agenda. Como es habitual en sus viajes oficiales, entre sus outfits siempre hay lugar para promocionar diseñadores españoles. Por una elección estratégica, llegó vestida de color rojo, lo que expertos denominan un “total look granate”, además, de ser uno de sus colores favoritos, es el elegido por el Instituto Cervantes como su emblema corporativo.
Letizia, llevó sobre los hombros un abrigo nuevo de CH Carolina Herrera, firma que en los últimos años se ha convertido en una constante de los viajes de la reina al extranjero. Si bien suele repetir abrigos, en esta ocasión estrenó uno especialmente para la visita oficial.
La esposa del rey Felipe, eligió la marca icónica de la diseñadora venezolana, tanto para el acto oficial de bienvenida de los reyes a Alemania, país que, don Felipe y doña Letizia visitaron en octubre, como el que tuvo lugar el año pasado en Suecia. También de Carolina Herrera era su cartera de mano.
Letizia, debajo del abrigo, lució un traje compuesto dos piezas de Roberto Torretta que estrenó en 2018 y que ya lo ha usado en distintas ocasiones. Completó el outfit con unos stilettos en el mismo tono que el atuendo de la firma Magrit. Respecto de las joyas, se limitó a lucir sus pendientes de triple aro de la firma española Gold & Roses.
La reina, ya participó del primer evento oficial de su agenda californiana, donde se encuentra con motivo de la inauguración de la primera sede del Instituto Cervantes en la Costa Oeste estadounidense.
Letizia fue recibida por el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, y el director de este nuevo centro de la institución, el escritor Luisgé Martín, y posteriormente participó de una reunión sobre la posición actual de la lengua española en Estados Unidos.
El director, Luis García Montero, le agradeció a Letizia su centro angelino, y consideró que es una muestra del apoyo que la casa brindó al Instituto Cervantes desde su creación en 1991.
