Es bella, joven y talentosa. Licenciada en Psicología, se decidió por el arte al poco tiempo de recibirse, y hoy es una de las actrices más aclamadas por la crítica. Vaya donde vaya cosecha elogios y aplausos. Es una artista completa, que continua creciendo y trabajando para ser cada día mejor. Tiene todo lo necesario para sentirse como en las nubes, pero para Paula Cancio descansar en el éxito no es una opción.
“Tengo muchos sueños, pero el más importante es poder seguir trabajando el resto de mi vida de este oficio, esa es mi gran meta. Yo soy de las que piensan que la vida te pone las cosas cuando uno está preparado para recibirlas. Cada vez tiendo menos a forzar, si hago todo lo que esté a mi alcance por conseguir lo que me motive. Siempre miro hacia adelante, miro hacia atrás solo para coger impulso. No me arrepiento de nada porque siempre trato de dar lo mejor en el momento en el que estoy. Dejo que la vida me sorprenda”, confiesa la actriz.
Nacida en Madrid, Paula está en pareja con Miguel Ángel Solá desde 2012, y junto al actor argentino son padres de Adriana, nacida en julio de 2013. Desde el comienzo de su relación, los 35 años de diferencia fueron motivo de debate, a pesar de que para ellos no significa nada. “Eso es un foco que pone el afuera, en ningún momento lo puse yo. Yo me enamoro de las personas, y esas personas tienen sus circunstancias, sus edades", dice.
A pesar del perfil serio con el que Solá suele mostrarse, la actriz asegura que hay mucho más detrás de él que solo seriedad.“Miguel es el ser más vulnerable que hay. Es pura sensibilidad. Por eso crea lo que crea. Lo que tiene nuestra profesión es que damos una imagen y la gente, muchas veces, cree que nosotros somos como los personajes que interpretamos”, agrega.
Ella más que nadie sabe lo que es sentirse identificada por un rol específico. Gracias a su belleza y andar seguro, los personajes de Paula suelen ser mujeres sexies y sin escrúpulos, capaces de hacer cualquier cosa por lograr sus objetivos, como el caso de Nurith Torres, rol que la actriz compone en la tira “La Leona”. Contrario a lo que muestra en ficción, la española ve la sensualidad como espejo de su interior.“No lo hago de una forma explícita. Creo que la mejor seducción es la de ser uno mismo. Estar segura de una y mostrarse tal como es. No me interesa lo que muestran mis personajes. Esa seducción estructurada me aburre soberanamente. Estoy lejos de eso en mi vida. Soy mucho más natural. La seducción es algo que va implícito en el hecho de ser mujer. Trato, a medida que me voy conociendo más, de hacerla menos explícita”, confiesa.
Mientras disfruta de su primer éxito en la TV argentina, Paula recorre el país junto a su marido con la obra teatral “El Diario de Adán y Eva”. “Estamos, sobre todo yo, chochos con la propuesta. De Argentina solo conozco Buenos Aires y Sunchales, y está es una forma de conocer el país. Estoy muy feliz por la cantidad de propuestas que me están llegando aquí, porque eso es una prueba de que mi trabajo está generando sus frutos. Aún no sé lo que haremos una vez que terminemos la gira. Creo que vamos a ir y venir, según el trabajo y los proyectos nos vayan llamando. Tenemos dos orillas abiertas, que son España y Argentina”, dice.
Madre dedicada, Paula organiza sus obligaciones de manera tal que le permitan pasar la mayor cantidad de tiempo posible con Adriana. Si bien reconoce que antes del nacimiento de la pequeña no se imaginaba siendo madre, hoy es consciente de que no lo cambiaría por nada. “Mi hija me hace profundamente feliz, y me ha ayudado mucho a conectar con una niña interior que yo la tenía un poco tapada. Esa curiosidad, ese sorprenderse por lo más básico, esa primera mirada del mundo. Mi hija me enseña a vivir. Yo no tenía ningún tipo de instinto maternal. Con su llegada se me ha despertado el instinto de madre de Adriana, es ella. Los padres siempre esperan que sus hijos tengan ciertas características, y ella tiene todas los puntos que yo hubiera puesto en el ideal de hijo. Me hace absolutamente feliz y me divierto mucho con ella. Desde que el momento en que vi la rayita en el test de embarazo, tuve clarísimo que la quería tener, no hubo ningún tipo de duda. Desde su llegada todo a sido una suma de cosas maravillosas. Sin lugar a dudas, ser madre fue la mejor decisión que tomé”, asegura.
Si bien le rehuye a las etiquetas, la española se atreve a definirse a sí misma con total sinceridad. “Paula Cancio es una mujer, madre y actriz. Es una persona con muchísima curiosidad por la vida y con muchas ganas de crecer todos los días. Hoy es una mujer asentada, de alguna forma, a la maternidad, que está en pleno encuentro con ella misma para entender que la mueve en la vida. A veces es fácil perderse en está profesión, por eso intenta siempre salvaguardar su esencia”, concluye.