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Luminosa y protocolar, la reina Máxima junto a la familia real holandesa volvió, como dicta la tradición, a los Alpes Austríacos, específicamente a la estación de esquí, para pasar sus vacaciones y perfeccionar su ya avanzada técnica en los deportes invernales. La reina Máxima (45) y el rey Guillermo (49) sonrieron para la foto oficial junto a sus hijas, las princesas Amalia (13), Alexia (11) y Ariane (9), en una pose muy descontracturada, todos juntos, tirados sobre la nieve.
Como si se hubiese puesto de acuerdo en un tácito Dress Code, la familia lució pantalones negros, diferenciándose en los tonos de sus camperas: mientras Amalia, la heredera al trono, se decidió por un anorak negro, Alexia lucía una campera azul y Ariane, una roja haciendo juego con sus botas. El rey optó por un chaleco y un sweater en la gama de los azules, mientras que Zorreguieta apostó por un outfit “total black” con un pañuelo de seda en tono azul púrpura y gafas espejadas de color rosa estilo aviador.
Fotos: AFP
