A toda velocidad, aunque con cautela, un auto con vidrios polarizados ingresa al estacionamiento privado de “Malloy´s Bar”, el lugar top en el bajo de Martínez, a orillas del río. Falta sólo una hora para la medianoche y para muchos de los comensales la cena está llegando a su fin. Con las ventanillas bajas, sonrientes y una complicidad que los delata, la bailarina y conductora de “Chekka”, Laurita Fernández (26) y Federico Bal (27) descienden del coche de la bailarina sin reparar a su alrededor. “Fede es muy importante en mi vida y significa mucho. Es muy importante para mí y por eso no podría tener sólo un ‘touch and go’ con él. Vivimos muchas cosas lindas. Ahora fuimos a comer juntos y cuando termine el teatro en Carlos Paz y regrese a Buenos Aires veremos qué pasa. Por ahí viene y se corta todo o nos terminamos casando…”, declaró la bailarina días atrás. A pesar del hermetismo que supieron alimentar durante meses, tras negar categóricamente que entre ellos existiera algo más que una amistad, el domingo 5 de marzo CARAS fue testigo de unos de los encuentros románticos de la pareja en Buenos Aires, en una de las escapadas que Fede hizo de su temporada en Carlos Paz con la obra “Sálvese Quien Pueda”, en el Teatro Del Sol. Durante la cita hubo besos apasionados, risas y mucha piel. La química entre ellos quedó evidenciada en cada gesto y lejos de ocultarlo, muy cariñosos, le dieron rienda suelta al amor en público. Tan pronto como llegaron, se instalaron en el pintoresco deck al aire libre con barra de tragos y sublime vista al río de La Plata del bar estilo californiano.
Relajados, disfrutaron de una exquisita comida gourmet que incluyó una “fresh salad” de frutos secos, verdes y queso brie. Luego de pasar dos horas a pura charla, la pareja más buscada emprendió su retirada cuando el reloj ya marcaba la una de la madrugada coronando una noche inolvidable y dejando en evidencia aquello que intentaron ocultar desde un comienzo, un romance apasionado.
Fotos: Ernesto Pages