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La astrología evolutiva nos invita a profundizar en la sabiduría ancestral de los planetas para comprender mejor nuestro propósito en esta vida. A través de la interpretación de los tránsitos planetarios, podemos explorar los patrones y lecciones que se presentan en nuestro camino, desbloqueando así el potencial de crecimiento y transformación personal. Al reconocer la influencia de los astros en nuestras vidas, abrimos la puerta a una mayor comprensión de nosotros mismos y del universo que nos rodea, trascendiendo las limitaciones de la mente racional y explorando las profundidades del alma humana.
El conocimiento de nuestra propia carta natal, nos invita a embarcarnos en un viaje de autodescubrimiento y transformación, donde cada aspecto de los planetas nos guía hacia nuestro destino más elevado y nos encontramos con la oportunidad de despertar a un nivel más profundo de conciencia y autenticidad. A medida que nos sumergimos en las profundidades del universo, recordamos que somos parte de algo mucho más grande que nosotros mismos. Con cada tránsito planetario, se nos presenta la oportunidad de liberar viejos patrones, sanar heridas pasadas y abrazar nuestro verdadero ser con amor y aceptación incondicional. Los planetas nos desafían a mirar más allá de nuestra realidad cotidiana y conectarnos con fuerzas más grandes que nosotros mismos; invitándonos a explorar las lecciones y oportunidades que se nos presentan en el camino.
Si bien aquí voy a dar un detalle general de cada tránsito, siempre tengan en cuenta que algunos pueden influir en mayor o menor medida, dependiendo siempre de la ubicación de cada planeta en nuestra carta natal. Por eso siempre es conveniente ir haciendo año a año la Revolución Solar, para tener un detalle más preciso de como cada planeta puede estar influyendo en nuestra vida, para saber los desafíos que se nos pueden presentar y para tomar decisiones de una forma más precisa y con mayor seguridad.
Comenzamos el mes de Junio con el Sol y Venus uniendo sus fuerzas en el Signo de Géminis, este tránsito astrológico trae consigo una energía vibrante y favorable, especialmente en áreas relacionadas con la comunicación, las relaciones y el amor. El Sol representa nuestra identidad, vitalidad y propósito, mientras que Venus rige el amor, la belleza y los valores. Cuando estos dos planetas se alinean en conjunción, su energía se combina para potenciar nuestra capacidad de atraer y disfrutar lo que amamos y valoramos, creando una atmósfera de armonía y equilibrio, tanto interna como externamente.
El 6 de junio la Luna Nueva en Géminis nos invita a sembrar nuevas semillas de intención y comunicación clara. Es un momento ideal para iniciar proyectos, establecer nuevas conexiones y explorar diferentes perspectivas y puntos de vista. Esta noche, es ideal para prender una vela (en lo posible color blanca), para conectar e intencionar con la energía de esta Luna. Les dejo algunas frases que podrían utilizar, para escribir en un papel o repetir varias veces como un mantra, para conectar con la energía dinámica que nos propone Géminis: “Me abro a expresar mis pensamientos y sentimientos con claridad y sinceridad”; “Me comprometo a aprender algo nuevo y expandir mi mente”; “Me permito ser flexible y adaptarme a los cambios”
A partir del 9 de junio, el Sol hará un aspecto duro a Saturno, con lo cual podemos sentirnos desafiados a enfrentar nuestras responsabilidades y limitaciones, como así también puede aparecer la sensación de sentirnos frustrados y puede afectar la autoestima y la confianza en nosotros mismos. Es importante durante este mes aprender a establecer límites saludables, decir “no” cuando sea necesario y no asumir más responsabilidades de las que se pueden manejar.
La cuadratura entre Marte y Plutón que tendremos el 11 de Junio es una alineación astrológica que puede traer energías intensas y desafiantes. Este aspecto puede influir en varios aspectos de la vida y afectar cómo nos sentimos y cómo interactuamos con nuestro entorno. La energía de Marte es agresiva, activa y combativa, mientras que Plutón representa el poder, la transformación y lo oculto. Cuando estos dos planetas forman una cuadratura, la intensidad emocional y la pasión pueden aumentar significativamente. Este aspecto puede generar tensiones y conflictos, tanto internos como externos. Aunque puede ser un período desafiante, también ofrece la oportunidad de transformación profunda.
El 20 de junio la cuadratura del Sol con Neptuno nos desafía a mantenernos firmes en nuestra realidad y a no sucumbir a la ilusión. La cuadratura entre estos dos cuerpos puede generar confusión, haciendo difícil ver las cosas con claridad y discernir la realidad de la fantasía. Por lo tanto, es importante practicar el discernimiento y la claridad mental, evitando el escapismo y buscando la inspiración desde un lugar de autenticidad y verdad.
El día 22 tendremos una Luna Llena en el signo de Capricornio. Recordemos que la Luna Llena representa un momento de culminación y realización, este puede ser un tiempo en el que los esfuerzos a largo plazo y el trabajo duro finalmente dan sus frutos. Es un momento para ver resultados tangibles de nuestras acciones y esfuerzos; evaluar nuestro camino profesional, reconocer nuestros logros y planificar los próximos pasos hacia el éxito. Aprovechemos esta energía para definir claramente lo que queremos lograr y establecer un plan de acción concreto.
Con Lilith ingresando en el signo de Libra, el 29 de junio, podemos sentir un llamado a honrar nuestra autenticidad y a establecer límites saludables en nuestras relaciones. Es un momento para liberarnos de las expectativas externas y reclamar nuestro poder personal en la búsqueda de armonía y equilibrio. Lilith, también conocida como la Luna Negra, representa la parte más oscura y reprimida de nuestra psique, así como la lucha por la autonomía y la igualdad. Cuando entra en Libra, un signo que rige las relaciones, la armonía y la justicia, se generan dinámicas intensas y significativas. Este tránsito puede revelar las dinámicas de poder ocultas y las desigualdades dentro de las relaciones, impulsándonos a buscar relaciones más auténticas y equitativas. Este tránsito puede traer a la superficie problemas no resueltos en las relaciones románticas y de pareja.
Para terminar el mes, tendremos a Saturno retrogradando en el Signo de Piscis. En astrología, se dice que un planeta está retrógrado cuando parece moverse hacia atrás en su órbita desde nuestra perspectiva en la Tierra. Este fenómeno es una ilusión óptica causada por la diferencia en las velocidades orbitales de la Tierra y el planeta en cuestión. Los periodos retrógrados son tiempos de revisión, reevaluación y reflexión. Nos invitan a mirar hacia atrás, reconsiderar nuestras acciones y corregir errores pasados. Cuando Saturno está retrógrado, su energía de responsabilidad y limitación se vuelve hacia adentro, invitándonos a una revisión interna de nuestras estructuras y compromisos. Durante este periodo, podemos sentirnos llamados a reevaluar nuestras creencias espirituales, nuestros sueños y nuestras aspiraciones más profundas. Este tránsito puede traer a la superficie viejas heridas y patrones inconscientes que necesitan ser sanados. Es un buen momento para el trabajo terapéutico y el autoconocimiento, utilizando la introspección para transformar nuestra realidad interna.
A medida que navegamos por las aguas del mes de junio, recordemos que cada tránsito planetario nos ofrece una valiosa oportunidad de crecimiento y evolución personal. Que este mes nos encuentre listos para abrazar los desafíos y bendiciones que nos presenta el cosmos, recordando siempre que somos co-creadores de nuestro destino.
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