El ex jugador de Racing Club de Avellaneda y actual jugador de La Scaloneta dos veces campeón consecutivas de la Copa América, Rodrigo De Paul, no solamente posee amor por el fútbol sino que también se puede reconocer otra pasión que está lejana al fútbol.
Se sabe que al desempeñarse en Europa el dinero o el sueldo es mucho más elevado que lo que se pueda ganar en Latinoamérica. Es por eso que muchos futbolistas pueden darse el gusto y acceder a lujos que difícilmente pudieran de este lado del continente.
En este caso, De Paul juega el Atlético de Madrid que dirige técnicamente Diego Pablo Simeone, mejor conocido como el "Cholo". El mediocampista campeón del mundo ya lleva algunas temporadas vistiendo la camiseta de "El Colchonero" y se le conoció una faceta que escapa del fútbol.
Esto tiene relación con que el bicampeoón de América y campeón del mundo con la Selección Argentina es una apasionado por los autos. En esta sintonía, es afirmable que el posee una colección de autos que muchos "fierreros" desearían tener. En primer lugar, tiene en su haber un BMW Serie 2 Coupé.
Pero no todo queda ahí, Rodrigo extiende su propiedad automovilística a una Ranger Rover y un Porsche Panamera. Varía entre camioneta y coches, pero de lo que no escapa es de los lujos que bien ganados tiene por la carrera que viene desempeñando.
La motivación extra que recibió La Scaloneta para ser bicampeona, según Rodrigo De Paul
En la despedida de la Selección Argentina de fútbol de Ángel Di María, que no podía ser de otra manera, otro de los afectados era Lionel Andrés Messi que había sufrido una lesión en el ligamento de su tobillo y una dolencia muscular que lo dejaron afuera en el segundo tiempo ante Colombia.
Al momento de salir, rápidamente la pantalla del Hard Rock Stadium fue con el astro argentino que lloraba desconsoladamente. Lo cierto es que Rodrigo De Paul y sus 10 compañeros dentro del campo de juego estaban concentrados en ganar el duro encuentro que planteó el rival.
En la visita a OLGA, el número 7 del combinado nacional confesó que observaron que Messi estaba triste y tomaron eso como motivación extra para ir en busca de la victoria. "En general, en la pantalla marcan el tiempo, es atípico que muestren eso. Se generó un griterío total por esa imagen y nosotros la vimos. Ahí dijimos que había que ganar por él", señaló.
En este contexto, De Paul también resaltó la importancia y lo que genera dentro y fuera de la cancha uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol: "Fue todo por él. No lo impone, pero transmite algo muy sano, de mucha paz, es imposible no quererlo. Y, cuando lo conocés, todavía más".
BL
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