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Fito Páez está atravesando un gran momento en su carrera musical. Desde el año pasado, fecha en que celebró los 30 años del álbum más vendido de la historia “El Amor Después del Amor” y con todos sus recitales con entradas agotadas, el rosarino tuvo un pequeño inconveniente en el escenario que pudo sortear.
Fito, luego de brillar en el “Cosquín Rock” viajó a Chile para participar del legendario “festival de Viña del Mar”. Ante una Quinta Vergara que recibió al rosarino entre aplausos y ovaciones, desplegó su talento y magnetismo.
Páez que es todo un showman, usó colores brillantes al igual que en Córdoba, su atuendo ya es un sello personal. Mientras cantaba su hit “Mariposa Technicolor” y con un gran despliegue escénico tropezó con un aparato que tiene que ver con el sonido que todo artista necesita y casi se cae,
El tropezón no terminó en caída, Fito pudo sortear la situación quien rápido de reflejos, evitó desplomarse. Su estado físico y su humor lo salvaron ya que frente al micrófono exclamó: “¡A la miércoles!”.
Fito Páez se alzó con dos gaviotas compartió imágenes en sus redes sociales con distintos momentos de su recital y escribió: “Chile es mi familia, hace muchos años que estoy aquí. Me han cuidado, arropado y me han dado lo mejor que es el amor que te puede dar un pueblo. ¡No hay más que eso! ¡Los amo! “, concluyó.
GR
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