La reina Sofía, una figura reconocida por su discreción y elegancia, ha vuelto a captar la atención pública, no por sus compromisos oficiales, sino por una curiosa y reveladora anécdota sobre sus hábitos personales.
A lo largo de su vida, la madre de Felipe VI ha demostrado ser una persona meticulosa y exigente, y sus viajes oficiales no son la excepción. Recientemente, se ha conocido un peculiar detalle que había pasado inadvertido durante años: la reina emérita evita sentarse en los inodoros de los hoteles en los que se hospeda.
El curioso motivo por el que la reina Sofía no utiliza inodoros cuando viaja
Este inusual comportamiento, que ha sorprendido a muchos, no responde a simples manías, sino a una estricta preocupación por la higiene.
Según fuentes cercanas a la Casa Real, la reina Sofía ha desarrollado este hábito a lo largo de décadas de servicio como reina consorte y, posteriormente, como reina emérita. Durante sus viajes oficiales, en lugar de usar los inodoros disponibles en los hoteles, prefiere uno portátil que ella misma transporta, asegurándose de que todo esté a su nivel de escrupulosidad.
La madre de Felipe VI no solo evita sentarse en inodoros de uso público o en hoteles, sino que también exige que el baño sea limpiado y desinfectado varias veces antes de su llegada. Este minucioso ritual forma parte de su rutina cada vez que se aloja fuera de su residencia habitual, lo que refleja que la reina Sofía se preocupa demasiado en mantener su entorno impecable.
AM
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