Compartí esta nota
Carolina de Mónaco es una de las royals más famosas e icónicas de la realeza contemporánea. Su figura ha sido blanco de controversia por sus múltiples matrimonios, la prensa la ha perseguido incansablemente y también ha sido un gran ícono de la moda y la elegancia.
Así, una de las posesiones más llamativas de la hija de Grace Kelly es su gran mansión ubicada en Le Clos-Saint Pierre. Esta fabulosa propiedad perteneció originalmente a su abuelo, el príncipe Pierre de Polignac y su abuela, Carlota Grimaldi y, luego de la muerte de su madre, pasó a ser su hogar.
Este es el lugar perfecto y a la altura de una princesa, ya que no solo es un espacioso hogar sino que cuenta con lujos, buen gusto, piezas tradicionales y las diferentes comodidades que caracterizan a las viviendas de las figuras de la realeza.
Cómo es el mansión de Carolina de Mónaco
Esta mansión cuenta con muebles antiguos y obras de arte y prima en toda la propiedad el color rosa, las columnas y otros elementos que se relacionan con el estilo arquitectónico neoclásico. Uno de los aspectos más atractivos es la fabulosa suite privada que cuenta con vista al mar Mediterráneo.
La mansión de Carolina de Mónaco está poblada de tonos pastel, lo cual aporta una sensación acogedora. El lugar cuenta con seis dormitorios, tres salones, una biblioteca, múltiples salones y comedores, una cocina y un magnífico jardín que completa el lujo de este lugar.
