Felipe VI y Letizia Ortiz muy pronto cumplirán 20 años de matrimonio y, cada día, surgen nuevas revelaciones y debates sobre la relación de los reyes. Hace veinte años, el actual monarca se casó profundamente enamorado de la también periodista, desafiando las advertencias de sus padres.
Sin embargo, según algunos conocedores de la reina Letizia, ella nunca estuvo verdaderamente enamorada del rey, sino que vio en su matrimonio una oportunidad de alcanzar poder e influencia en España.
Como en cualquier matrimonio, el de Felipe y Letizia ha tenido sus momentos difíciles. Aunque externamente parecían una pareja fuerte y unida, la realidad era otra. Jaime del Burgo, un abogado cercano a la familia real, reveló que la reina había tenido una relación extramatrimonial con él durante varios años. Esta infidelidad se hizo pública en 2012, en un periodo en que se hablaba de una crisis en el matrimonio real. Inicialmente, se pensaba que los problemas eran causados por el caso Nóos, los escándalos de Juan Carlos y la presión sobre la corona, pero la verdad era más personal.
Uno de los momentos más tensos en la relación entre Felipe y Letizia ocurrió cuando la monarca expresó su deseo de conocer a Joaquín Sabina, uno de sus cantantes favoritos. A pesar de sus dudas, el rey organizó una cena en la casa del cantante, que se prolongó hasta altas horas de la madrugada.
Por qué Joaquín Sabina tiene prohibido entrar a la Casa Real Española
Letizia estaba emocionada por conocer a Joaquín Sabina, pero la tensión aumentó cuando el cantante la invitó a bailar después de la cena. Felipe, sorprendido e incómodo, no pudo ocultar su malestar cuando el intérprete le arrebató la oportunidad de bailar con su esposa al ritmo de una canción compuesta especialmente para su boda.
Según el cronista real Jaime Peñafiel, en su libro “Los silencios de Letizia”, Sabina hizo un comentario que enfureció aún más a Felipe: "¡Oye, Felipe, saca a bailar a mi novia que le está dando un ataque de celos!". Este comentario no fue bien recibido por el rey, y desde entonces, el artista ha sido persona non grata en el palacio.
El cantante, conocido por su postura antimonárquica, no ocultó sus sentimientos, incluso cuando recibió a Felipe en su casa. "A Felipe le molestó que no quitase la bandera republicana de la mesa ni para cenar", comentó Sabina a Peñafiel.
Este incidente no afectó tanto a Letizia Ortiz, pero al regresar a casa, la pareja tuvo una fuerte discusión que casi pone fin a su reciente matrimonio. Desde entonces, la Casa Real ha prohibido la entrada de Joaquín Sabina por orden de la reina consorte para evitar problemas con Felipe VI.
AM