En medio de la conmoción por el accidente de Meghan Markle y el príncipe Harry en Nueva York, la atención se centró en la reacción de otros miembros de la Familia Real Británica. Una de las figuras más destacadas en este sentido fue Kate Middleton, la esposa del príncipe William.
Después del mal momento del príncipe Harry y Meghan Markle, Kate Middleton apareció en público para cumplir con sus compromisos oficiales. A pesar de toda la vorágine generada en torno a los Sussex, ella continuó con su agenda con normalidad, sin dejarse afectar por los acontecimientos.
La primera aparición pública de Kate Middleton después del incidente de Meghan Markle y Harry fue durante su visita a la base de Anna Freud en Londres. En este evento, se llevaron a cabo mesas redondas relacionadas con la salud mental y los desafíos que enfrentan los jóvenes en la actualidad.
Vestida con un diseño verde de la firma Suzannah, la princesa de Gales se mostró radiante y sonriente, completamente ajena a todo lo que se ha comentado sobre sus cuñados.
Durante la visita, Kate tuvo la oportunidad de conversar con un grupo de estudiantes de secundaria que participaron en actividades interactivas enfocadas en cómo lidiar con sentimientos de ansiedad.
Qué se sabe hasta ahora del accidente de Meghan Markle y el príncipe Harry
El príncipe Harry y Meghan Markle fueron los protagonistas de una de las persecuciones más preocupantes después de la muerte de Lady Di.
Todo sucedió en Nueva York cuando un grupo de paparazzis comenzaron a perseguirlos en plena calle, evadiendo todas las normas de tránsito. "Continuaron siguiéndonos y estuvieron al lado de nuestro coche. Sacaron fotos cuando nos detuvimos y nos estaban grabando. Pero nunca sentí que estaba en peligro", dijo el chofer de los Duques de Sussex al Washinton Post.
Por su parte, Eric Adams, el alcalde de Nueva York, señaló que el hecho fue imprudente e irresponsable. "Dos de nuestros agentes podrían haber resultado heridos", sentenció.
A toda estas versiones también se sumó la de los mismos periodistas que siguieron a Harry y Meghan Markle, quienes aseguraron lo contrario. Según lo que exponen los fotógrafos que estuvieron en ese momento, la escolta de seguridad de los royals se había comportado de forma imprudente y hasta los provocaba burlándose de ellos mientras bloqueaban las calles.
