Tras arribar a Inglaterra la semana pasada, los duques de Sussex están cumpliendo con las últimas responsabilidades como miembros oficiales de la Corona británica.
Mientras se preparan para uno de los últimos eventos, el príncipe Harry y Meghan Markle decidieron invitar a su personal privado del Palacio de Buckingham a un almuerzo muy especial.
El pasado jueves, horas antes de su reaparición en los premios Endeavour, los duques y su staff tuvieron una comida en The Goring, un lujoso hotel cuyo restaurante se encuentra entre los cuatro únicos establecimientos de Londres con una estrella Michelin.
“Harry y Meghan a menudo han hecho cosas divertidas con su staff como organizar fiestas con pizzas o contratar camiones de helados para su personal, pero querían hacer algo especial”, dijo una fuente a Page Six. De acuerdo con este medio estadounidense, Meghan y Harry agradecieron a su equipo por todo el apoyo y más de uno no puedo evitar conmoverse con sus palabras. “Los empleados han estado trabajando las 24 horas para asegurarse de que esta última visita fuera lo mejor posible”, aseguró el mismo informante.
Vale destacar que la pareja Real tuvo que dejar ir a su secretaria privada, Fiona Mcilwham, y su jefa de comunicaciones, Sara Latham, que anteriormente trabajó para los Obama. Otra funcionaria que ya no estará bajo sus servicios es Julie Burley, que trabajó con el príncipe Harry y los duques de Cambridge para sacar su campaña sobre la salud mental, Heads Together, y dirigió las comunicaciones de los primeros Juegos Invictus en 2014. Además, se encuentra entre ellas Clara Loughran, quien le entregó a Meghan su ramo de novia el día de su boda.