Hay conexiones inexplicables, puentes de amor sin límites de distancias y culturas. "Me da la sensación de que, si existen otras vidas, tengo que haber sido rusa. Nada me sorprende para mal, me siento bien, hasta entiendo el idioma ruso mejor que el inglés", afirma Natalia Oreiro, intentando definir el profundo feeling que tiene con "la Tierra de los Zares", a donde viajó para participar del Festival Internacional de Cine de Moscú, donde la cantante y actriz uruguaya presentó "Nasha Natasha" ("Nuestra Natalia"), documental dirigido por Martín Sastre, sobre las visitas y giras de la artista en Rusia, en 2015, cuando ofreció conciertos en 16 ciudades, recorriendo decenas de miles de kilómetros. "En realidad, no sabíamos que íbamos a terminar haciendo una película, pero sí teníamos ganas de registrar la gira, porque era la primera vez que yo iba a viajar a tantas ciudades, y a un lugar como Siberia, y me pareció muy importante tener ese registro. Es un documental que habla de la relación que existe entre nosotros, sobre cómo y porqué se genera ese amor entre alguien que nació en el cerro de Montevideo y alguien que nació en Siberia", agregó.
Fue tan grande la respuesta que tuvo la presentación de "Nasha Natasha" que debieron agregar funciones extra, porque las entradas para las dos primeras se agotaron en treinta minutos. "El director del festival, el ganador del Oscar Nikita Mijalkov, en su discurso de clausura me reconoció como una de las personas más populares de Rusia, me invitó a conducir el cierre del evento, transmitido en vivo para varios canales, y a cantar ‘Cambio Dolor’ junto a la banda", afirmó.
También en su faceta de embajadora del charme argentino, Oreiro desfiló por la Red Carpet un vestido largo, con capa, gran tajo y escote, diseñado por Naeem Khan, zapatos de Jimmy Choo y joyas de Chopard, outfit que despertó la admiración del público y los medios, que destacaron la refinada sensualidad de Natalia, quien el 24 de julio conducirá la entrega de premios Platino al Cine Iberoamericano, desde Punta del Este, para 44 millones de televidentes; estrena su película “Gilda” el 15 de septiembre; y en diciembre volverá a Rusia para presentarse en Moscú y San Petersburgo, entre otras ciudades.