El 15 de julio de 2010 fue un día histórico en Argentina. Después de meses de intenso debate en el Congreso, se reformó el Código Civil para permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo. En sintonía con la noticia, Revista CARAS convocó a Christian Sancho para levantar la bandera a favor del matrimonio igualitario.
Con un look andrógino, el actor y modelo se calzó un corset y declaró: "Hay que ser muy hombre para aceptar la feminidad masculina". Comprometido con la causa gay y la ley de matrimonio entre personas del mismo sexo, Sancho habló del rol que interpretaba en la serie "Botineras". El actor componía al "Flaco" Riveiro, un futbolista gay que acababa de salir del closet pese a los prejuicios. En la ficción, Sancho se enamoraba de "Lalo" (Ezequiel Castaño).
"Este personaje aportó a mi crecimiento como actor y fue ganando en honestidad. Conté a un hombre que es humano, ni bueno, ni malo", afirmaba Christian, quien también se explayó respecto al amor gay. "Admiro el poder de amar de muchos homosexuales. Es un amor más sano y honesto que el heterosexual"; "Cuando hay cierta fobia o discriminación respecto a la libertad de expresión o sexual, siento que son actos retrógrados y aberrantes de una sociedad vieja y una mente llena de soberbia y arrogancia" fueron algunas de sus declaraciones.