No se cansa de repetirlo. Sabe que sus palabras llegarán a mucha gente y desea, necesita, que el difícil momento que atraviesa sirva para concientizar, prevenir y ayudar a otros. "El cáncer no te avisa", sostiene con certeza el reconocido director teatral Pepe Cibrián Campoy, quien tras operarse de un cáncer de próstata detectado "de casualidad", en un chequeo de rutina, se entregó a una charla íntima con CARAS en la habitación del Sanatorio Otamendi donde se recupera de la reciente cirugía.
"Si uno no se examina no se entera porque la patología no presenta síntomas. Yo iba perfecto al baño y sin embargo lo tenía hace meses, sin saberlo", confiesa el autor y dramaturgo y asegura: "Las mujeres se cuidan mucho más porque saben que es por prevención. En cambio los hombres, ya sean homosexuales o heterosexuales, no toman consciencia y no lo hacen". A horas de haber sido intervenido quirúrgicamente, cuenta cómo atravesó la impactante noticia que lo tomó por sorpresa. "Hace 10 días fui a hacerme una cirugía estética en la que me retoqué las bolsas, la papada y los párpados, con el doctor Guillermo Blugerman. Él me sugirió que me hiciera un chequeo de próstata. El año pasado me había dado bien y sin embargo, esta vez me dio mal. Inmediatamente llamé a un amigo oncólogo y me lo confirmó, me dijo: 'No lo veo bien'. Al día siguiente, fui a un urólogo que me hizo una ecografía y una biopsia que me dio mal. Entonces llamé a mi obra social y me atendió inmediatamente el médico Pablo Tapia con todo su equipo. Fijamos fecha para el quirófano y gracias a la maravillosa operación, en la que me sacaron la próstata, estoy bien. En ese momento no se me pasó otra cosa por la cabeza más que operarme", cuenta mientras bebe un vaso de agua.
Conciente de que su caso puede alertar a muchos hombres, escribió una sentida carta que hizo pública en su Facebook a la que tituló: "Por un dedo en el culo" cuyo objetivo es generar conciencia sobre la importancia de la detección temprana del cáncer a través de los chequeos médicos. "Miles de personas se han comunicado conmigo luego de leerla, gente que no conozco e incluso un hombre que no está de acuerdo con mi opinión sobre la sexualidad, sin embargo me escribió para decirme que 'sólo un hombre con mayúsculas puede decir algo así'. Realmente no puedo más que agradecer el amor incondicional de todos", cuenta visiblemente emocionado el actor, autor y director, quien está en pareja, desde hace 16 años, con Santiago Zenobi. "A él lo afectó mucho todo ésto... Creo que se paralizó más que yo. Santiago es un compañero incondicional que Dios me ha mandado; un ser de una ternura, transparencia y fragilidad muy fuerte", agrega.
Mientras camina por la amplia suite del Sanatorio, donde se encuentra contenido por sus familiares y amigos, recuerda otros momentos duros de su vida en los que a pesar de la adversidad logró salir adelante. "Tuve una gran depresión que duró 3 años cuando un camión me sacó literalmente el pie y estuve 3 meses sin poder pisar. ¡Me volví loco! Recuerdo que no podía quedarme acostado mirando televisión", cuenta emocionado. Aunque se muestra fuerte, con el correr de la entrevista deja fluir su costado más vulnerable. "Antes de que me pasara ésto mi mayor miedo era el paso del tiempo. Cada vez que apagaba la lámpara de mi mesita de luz antes de dormir pensaba: 'una vez más que la apago'. Hoy me emociona estar vivo, me emociona el amor de la gente y esta charla", expresa con las lágrimas. Y, casi sin respiro, completa: "Durante el día estoy bien pero por la noche, en la soledad más privada y profunda, me vienen pensamientos, como a cualquier persona que padece una enfermedad difícil, sobre el sentido de la vida, de la muerte y el suicidio, todo lo que te puedas imaginar me ha pasado por la cabeza... Dicen que estas cosas modifican la cabeza y la actitud de uno y puede que así sea".
Si bien debe permanecer en reposo para su recuperación total, Cibrián, fiel a su estilo, asegura que "en unos días" saldrá para estar presente en las audiciones de su próxima obra "Lord", un musical dirigido por Ricky Pashkus, que protagonizará Pepito junto a Georgina Barbarossa, con producción de Julieta Kalik y Santiago Zenobi, que estrena el 5 de enero del próximo año en el Teatro Astral. "Lo único que quiero es hacer y vivir. Yo sé que voy a ir", se promete a sí mismo y piensa en voz alta: "Siento que hay veces que uno tiene pequeñas misiones y si en algo sirve mi palabra para que alguien se cure o pueda agarrar el cáncer a tiempo, valió la pena tenerlo".
Por Sabrina Galante.
Producción: Alicia Blanco.
Fotos: Eduardo Giménez.
Agradecimientos: Sanatorio Otamendi, Pipina Peavlovsky, Doctor Pablo Tapia, Doctor Guillermo Blugerman, Joe Miranda.