Hoy se cumplen 20 años del asesinato de José Luis Cabezas y se realizan varios actos a lo largo del país para conmemorar al fotógrafo de la revista Noticias, quien fue hallado calcinado en Pinamar en 1997 dejando rastros del mayor hecho de brutalidad contra la libertad de prensa desde la vuelta de la democracia.
José Luis se encontraba junto al periodista Gabriel Michi en el balneario de la costa argentina tratando de conseguir una entrevista con el empresario Alfredo Yabrán, a quien logró fotografiar para la portada de la revista frente a las negativas del empresario por dar declaraciones al medio.
“Ese 25 de enero la vida de una familia, la del periodismo argentino y la de todo un país iban a cambiar para siempre. También la mía”, escribía Michi, en su libro Cabezas, un periodista, un crimen, un país. “Habían asesinado a un reportero gráfico en Pinamar y lo hicieron de la manera más brutal y mafiosa”, manifestaba ante los trascendidos sobre el caso: habían estado implicados varias personas del entorno de Yabrán, entre ellos, el jefe de custodia del empresario, el ex sargento Gregorio Ríos, el comisario de Pinamar, Alberto Gómez y dos subordinados, además de varios integrantes de la Banda de los Horneros.
Si bien hubo tres condenados a reclusión perpetua y seis a prisión perpetua, en diálogo con el diario Clarín Michi asegura que, “al principio, parecía que la Justicia se había puesto los pantalones largos, cuando los condenaron. Pero después no”, teniendo en cuenta que hace dos semanas Gustavo Prellezo quedó en libertad aunque fue reconocido como el autor material del crimen tras matar al fotógrafo de dos tiros en el cráneo. Michi describió a la liberación como “la coronación de la impunidad que rodeó al caso, porque tenían perpetua todos los asesinos. Pero primero cambiaron la carátula de la causa y con eso redujeron las condenas, más la aplicación del dos por uno y la buena conducta... Uno siente bronca, impotencia y una gran decepción, porque apostamos a la Justicia”.
Gladys Cabezas, hermana del fotógrafo, llevó a cabo un acto en la cava de General Madariaga, donde ocurrió el hecho y hoy en día se encuentra un monolito en su memoria. Además, por la noche se inaugurará una muestra de fotos sobre la vida del reportero, que fue curada por Gladys y otros colegas.