Desde Barcelona, Sole Nardelli ha compartido su exquisita receta con los docentes de los talleres de cocina de la ONG. Con su guía, los docentes y sus estudiantes producen pan dulces en las distintas sedes de Pequeños Pasos.
Lo que hace única a esta iniciativa es su carácter federal y solidario: grandes chefs de diversas provincias se sumaron al proyecto, uniendo esfuerzos. Desde Misiones, Gunther Moros; en Jujuy, Walter Leal; en Buenos Aires, Martín Molteni; en Neuquén, Julieta Caruso, y en Ushuaia, Jorge Monopoli.
Las personas pueden comprar un pan dulce que será entregado a una familia en riesgo social que acompaña la ONG y con lo recaudado se podrá dar continuidad a los talleres y cursos que generan empoderamiento y oportunidades de empleo para estas familias.
Además, las empresas también pueden sumarse comprando el Pan Dulce como regalo corporativo.
“La educación es libertad, es crear dignidad, y por eso es tan importante apoyarla”, expresa Sole Nardelli, quien acompaña a Pequeños Pasos desde hace muchos años.
Yesica Avejera, directora nacional del programa Oficios, destaca: “Sumarse a esta campaña es mucho más que compartir algo rico en la mesa navideña. Es colaborar con miles de familias, poniendo el corazón, porque está hecho con el cariño de las manos, de quienes aprenden en nuestros talleres en todo el país y con esperanza construyen un futuro mejor, sabiendo que no están solos.”
Desde su creación en 2007, Pequeños Pasos ha trabajado para mejorar la calidad de vida de las comunidades más vulnerables de Argentina. Este proyecto es una invitación a ser parte de esa transformación.
¿Cómo sumarte? Podés donar un pan dulce ingresando en pequenospasos.my.canva.site/pan-dulce y seguir las actividades de la ONG en Instagram: @pequenos_pasos.
Estas fiestas, regalá más que un pan dulce: regalá oportunidades, dignidad y esperanza.