¿Cómo se decidió por la medicina y cómo comenzó su formación?
Desde muy joven supe que la medicina iba a ser mi camino. Mis primeros pasos estuvieron marcados por una vocación profunda y por el deseo de acompañar a las mujeres en todas las etapas de su vida.
Estudié en la Universidad Nacional de Córdoba, un lugar que me formó no solo con exigencia académica, sino también con humanidad. Más tarde, realicé la residencia en la Maternidad Nacional y en el Hospital de Clínicas de Córdoba, donde descubrí el valor de la escucha, la empatía y la presencia en momentos cruciales. Durante esos años trabajé intensamente en obstetricia y ginecología general, haciendo numerosas guardias y enfrentando situaciones que fortalecieron mi compromiso con esta profesión.
¿Cómo llegó a la especialización actual?
Con el tiempo, comprendí que la medicina tenía para mí un sentido aún más amplio. Empecé a notar que muchas mujeres buscaban respuestas que la ginecología tradicional no siempre podía ofrecer: cambios en la energía, en la vitalidad, en la libido, en su bienestar cotidiano. Esa inquietud me impulsó a especializarme en medicina regenerativa y funcional, un enfoque que permite mirar a la mujer de manera integral, considerando lo hormonal, lo metabólico, lo emocional y lo sexual como partes inseparables de su salud. Complementé mi formación con un diplomado en longevidad saludable y modulación hormonal, y me especialicé en láser vaginal y otros tratamientos regenerativos.

¿De qué manera puede ayudar a través de las consultas?
Hoy mi práctica está enfocada en ayudar a las mujeres a recuperar bienestar y calidad de vida a través de terapias como láser vaginal, radiofrecuencia, plasma rico en plaquetas, modulación hormonal bioidéntica, optimización metabólica y herramientas de medicina funcional. Cada plan es personalizado, porque cada mujer tiene una historia, un cuerpo y un ritmo únicos. La escucha atenta, sin apuros y sin tabúes, es uno de los pilares que más diferencia mi trabajo.
Para finalizar… ¿Planes para el 2026 y una reflexión sobre su recorrido?
A mediano plazo, me proyecto profundizando este camino: incorporando tecnologías avanzadas, ampliando mi consultorio y construyendo un espacio cada vez más cálido y seguro donde mis pacientes encuentren contención y soluciones reales.
Si pudiera volver a empezar, solo cambiaría una cosa: haber confiado antes en mi intuición. Esa intuición que siempre me indicó que la medicina debía ser más cercana, más preventiva y más humana. Pero cada paso del recorrido me llevó exactamente hasta aquí, a la ginecología regenerativa y funcional, que hoy es mi verdadera pasión.
Betiana Marinelli
Mp 29549
ME 13300
Instagram: dra. betianamarinelli
Guerra de periodistas: Jorge Rial contra Joni Viale por "una casa de un palo y medio"
Sexo y orgasmo: ¿cómo llegar al squirt?
Cuánto cuestan el pan dulce y los turrones de Navidad que vende Damián Betular en su pastelería